El secretario general de Podemos y candidato a la Moncloa, Pablo Iglesias, ha dado este martes por finalizada su etapa como eurodiputado para centrarse ahora en «ganar» las próximas elecciones generales.
En la rueda de prensa que ha ofrecido en Estrasburgo para explicar los motivos por los que deja su escaño, Iglesias ha destacado que ha aprendido «mucho» durante los quince meses de actividad en la Eurocámara. «No hay nada que vaya a centrar a partir de ahora mi trabajo más que el esfuerzo de campaña electoral para que el cambio llegue a mi país«, ha sentenciado.
«Nosotros salimos convencidos de que vamos a ganar», ha defendido al ser preguntado sobre la bajada que está protagonizando Podemos en las encuestas, para añadir que la «la preocupación» que demuestran sus «adversarios» revela «que hay partido y que 2015 ha sido el año de las sorpresas y del cambio».
Aun así, Iglesias ha reconocido que ha sido «un año y medio difícil» desde que Podemos consiguiese cinco representantes en el Parlamento Europeo tras las elecciones de mayo de 2014. En este tiempo, ha asegurado, la formación ha aprendido a «endurecerse, a encajar golpes y a reconocer errores».
No obstante, también ha defendido que en este año y medio, Podemos «ha contribuido a que muchos cambios se produzcan y a que vayan a ser inevitables», y todo ello «sin haber ganado las elecciones y sin haber entrado en el Parlamento español».
Por último, Iglesias ha señalado que los eurodiputados que mantienen su puesto en el Parlamento Europeo van a tener un papel activo en la campaña electoral, y ha destacado que está «orgulloso del trabajo que están llevando a cabo» y ha mostrado su confianza en que «van a seguir dando ejemplo».
Antes de la rueda de prensa, líder de Podemos ha protagonizado su última intervención en el pleno del Parlamento Europeo, que ha aprovechado para despedirse, con un discurso crítico con todos los grupos mayoritarios en la Eurocámara, en el que ha pedido a sus representantes que «no sigan destruyendo la dignidad de Europa».
Última intervención
«Vuelvo a mi país para que no haya, para que no siga habiendo en España, gente como ustedes en el Gobierno. Pero quiero pedirles algo antes de marcharme, cambien su política», ha dicho Iglesias en su última intervención tras quince meses como eurodiputado.
Lo ha hecho en un debate sobre la gestión de la Unión Europea de la crisis de los refugiados en el que también ha participado el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, a quién ha acusado de «favorecer el fraude fiscal» y negociar en secreto ventajas para las multinacionales cuando estuvo al frente del Gobierno luxemburgués.
Iglesias también ha tenido duras palabras para el líder de los Liberales (ALDE), Guy Verhofstadt, por permitir políticas en materia exterior «que estamos pagando y que tienen que ver con la miseria de millones de familias a las puertas de Europa.
A los jefes del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, y de los Socialistas y Demócratas (S&D), Gianni Pittella, ha afeado que hayan participado de una «maldita gran coalición».
«Aprendan a respetar la democracia, aprenda que a veces los ciudadanos votan cosas distintas de lo que representan ustedes», ha dirigido Iglesias contra el líder de los 'populares' europeos. Weber, en una intervención anterior, alertó de las consecuencias de que Portugal pudiera optar por un Gobierno de izquierdas.
Sobre la respuesta de la UE a la llegada masiva de demandantes de asilo, Pablo Iglesias ha reclamado a los líderes europeos y sus instituciones que cesen de responder con «alambradas». «Humillar a esa gente es humillar a Europa», ha advertido, para reclamar una política europea «responsable». «Dejen de jugar al ajedrez con los pueblos del Mediterráneo (..). No sigan destruyendo la dignidad de Europa, señores», ha sentenciado.
Asimismo, Iglesias ha querido recordar su primera intervención ante el pleno de la Eurocámara, que se reúne mensualmente en Estrasburgo (Francia), en la que dijo aspirar a «una Europa diferente, que fuera un poco menos dura con los débiles y un menos complaciente con los poderosos».
«Por desgracia esta afirmación, 15 meses después, sigue estando vigente», ha lamentado, para censurar los eslóganes xenófobos de algunos eurodiputados y las «lágrimas de cocodrilo» de otros cuando se discute sobre la situación de los refugiados que buscan protección en la Unión Europea.
Actividad parlamentaria
El líder de la formación morada ha registrado este martes en el Parlamento Europeo una carta en la que comunica al presidente y al secretario general de la institución que deja su acta para presentarse a las elecciones generales en España. Su intención es centrarse en la campaña electoral de cara a a los comicios del próximo 20 de diciembre.
En un comunicado, su partido ha destacado la labor que ha desempeñado Iglesias como eurodiputado. Según la formación morada, el ritmo de actividad de Pablo Iglesias en el Parlamento Europeo ha ido aumentando progresivamente desde el inicio de su mandato a mediados de 2014.
De hecho, el partido ha subrayado que Iglesias se marcha ocupando la sexta posición en el ranking que mide la actividad parlamentaria de los 54 eurodiputados españoles, una clasificación en la que llegó a ocupar el segundo puesto después del verano de este año.