Los cuerpos de los tres militares fallecidos en el accidente de un helicóptero en aguas de Canarias han llegado en la mañana de este domingo al Arsenal Militar de Las Palmas, según ha informado el Ministerio de Defensa. Las tareas de rescate de los cuerpos del capitán José Morales, el teniente Saúl López y el sargento Jhonander Ojeda finalizaron este sábado y se procedió a trasladar los restos mortales a la isla en el Buque de Acción Marítima (BAM) 'Rayo'.
De esta manera, los cadáveres han sido trasladados al Instituto Anatómico Forense para llevar a cabo la autopsia y proceder a los trámites legales establecidos. El departamento dirigido por Pedro Morenés ha indicado que no se fijará la fecha del funeral hasta que terminen estos trámites y ha informado de que depende del trabajo de los forenses y que se consultará a las familias qué es lo que quieren hacer.
Por su parte, Morenés ha visitado a los buceadores que recuperaron los cuerpos y les ha transmitido su «reconocimiento» y «orgullo» por el trabajo realizado. Las tareas de izado del helicóptero permanecen paradas en estos momentos debido al mal estado del mar en la zona, aunque se reiniciarán las labores una vez que las condiciones meteorológicas lo permitan.
Los buzos de la Armada Española recuperaron este sábado al mediodía los restos del tercero de los militares fallecidos, después de que las labores de rescate se reanudaran a primera hora de la mañana en un dispositivo contrarreloj que ha completado con éxito la misión de los buceadores.Tras una inmersión inicial para realizar los preparativos necesarios, los buceadores se sumergieron constantemente hasta que hacia las 13.00 horas han conseguido recuperar el tercer cuerpo y subirlo a bordo del Buque de Acción Marítima (BAM) 'Rayo'.
Los cadáveres de los otros dos militares atrapados en la cabina del helicóptero fueron rescatados el viernes en una operación en la que participaron veinte buceadores.
La caída del helicóptero, un AS 332 'Suiper Puma' se produjo después de que el aparato hiciera una escala en la ciudad mauritana de Nouadibou. El origen del viaje era Dakar, la capital de Senegal, donde la tripulación había cumplido una misión de adiestramiento de las fuerzas armadas del país africano.