El Ayuntamiento de Estepona va a integrar los efectivos de su parque de bomberos en el Consorcio de Bomberos de la Costa del Sol. Una decisión con la que se espera aliviar el déficit que supone el servicio de bomberos a la ciudad, pero que, de rebote, acabará por perpetuar una situación actualmente sub iudice, la del llamado “sargento Astapa”.
En el sumario del ‘Caso Astapa’ se investiga la contratación presuntamente irregular de un mando de los bomberos, que además ha sido ascendido al empleo de sargento de bomberos. Según la denuncias –que respaldan las escuchas policiales– la contratación de este funcionario se hizo sin tener en cuenta la Ley de Emergencias de Andalucía. El sargento, a resultas de eso, viste el uniforme de bombero sin haber aprobado las preceptivas oposiciones de bombero.
La situación consolidada en el Ayuntamiento, ahora, con el paso de los efectivos al Consorcio de Bomberos de Costa del Sol, eleva aún más, de carambola, la situación de este funcionario.
Los bomberos de Estepona dejarán de ser funcionarios municipales para serlo del Consorcio, dependiente en última instancia de la Diputación Provincial de Málaga. Los bomberos rasos perderán condiciones económicas con este trasvase –300 euros según las fuentes consultadas–, pero no los mandos. El jefe de bomberos –que, según el auto, propició la contratación irregular– y el “sargento Astapa”, en virtud de sus empleos de oficiales, mejorarán su sueldo y condiciones laborales.
Esta situación ha provocado indignación en el seno del cuerpo de bomberos municipales. El paso al consorcio supone un alivio financiero para el Ayuntamiento, pero los pasos del controvertido sargento tienen soliviantado a los bomberos malagueños, que vieron sus posibilidades de ascenso frustradas con esta contratación, que la Policía cree que fue irregular.