Ciudadanos, la formación estrella en las encuestas de esta campaña electoral, tiene claro que España debe de «reforzar la participación en misiones internacionales». Pero el partido liderado por Albert Rivera no se conforma sólo con el modelo actual de operaciones humanitarias y subraya en su programa electoral para el 20D que los ejércitos deben de prepararse para defender la «seguridad» en el exterior «tanto en misiones de paz como en intervenciones específicas frente a las potenciales amenazas fuera de nuestras fronteras». Por eso, propone aumentar el gasto militar y potenciar el peso específico de la Defensa Nacional en la política española.
La formación 'naranja' no se conforma con eso. Defiende que «España debe asumir el liderazgo de estas misiones respondiendo a su verdadero potencial en el contexto internacional”. Su belicosidad contrasta con el pacifismo manifiesto de Podemos, el único partido que -paradójicamente- ha optado por exhibir a un general de cuatro estrellas como su principal fichaje. Así, mientras Rivera defiende abiertamente una intervención militar en Siria, el ex jefe de la cúpula militar Julio Rodríguez -propuesto por Pablo Iglesias para ser su ministro de Defensa de su hipotético Gobierno- ha expresado en público su oposición a combatir al Estado Islámico y su preferencia por el diálogo y la solución diplomática.
Las nuevas formaciones irrumpen en el panorama político con ganas de cambiar el enfoque tradicional en materia de Defensa. Podemos, lejos de creer en una mayor participación en misiones internacionales, aboga por promover «una renuncia a la guerra como herramienta ofensiva de política exterior” y propone someter a consulta ciudadana la participación de las FAS en operaciones en el exterior. El PSOE, por su parte, propone una reestructuración orgánica y de infraestructuras y dedica un amplio apartado a impulsar la Defensa a nivel europeo.
Más presencia internacional
Ciudadanos quiere una mayor presencia de España en los organismos internacionales y también quiere ponerse al nivel de nuestros aliados. La formación de Rivera quiere hacer converger el gasto en Defensa de España según lo “comprometido con sus socios y aliados”, lo que supondría un incremento del gasto hasta el 2%, según pide la OTAN, desde el 0,8% actual.
Podemos, por el contrario, propone una mayor autonomía de España y Europa en la OTAN e incluso va más allá y habla de “neutralizar el papel desestabilizador”de la Alianza en Europa del este y mejorar las relaciones con Rusia. Una declaración de intenciones que también incluye el PSOE en su programa. Izquierda Unida, que pide una disminución del gasto militar, continúa con su lema “OTAN no”, ya que supone “una amenaza para la seguridad”.
La formación Alberto Garzón pide también la retirada de España de las bases de la OTAN. En la misma línea, Podemos propone revisar los convenios de defensa, especialmente el suscrito con Estados Unidos sobre la base militar de Morón. El partido de Pablo Iglesias considera que el mantenimiento de bases estadounidenses en suelo español “afecta a nuestra soberanía y supone un riesgo para nuestra seguridad nacional”.
En su escueto programa de Defensa, el Partido Popular mantiene una postura conservadora: propone seguir manteniendo el papel de España en la OTAN y las responsabilidades ya acordadas con los países socios y aliados. Una estrategia similar a la propuesta por el PSOE, que además sugiere una serie de iniciativas para avanzar hacia una defensa común europea.
Programas de armamento
Uno de los asuntos más criticados en por los grupos de oposición al Gobierno es el de los grandes programas de armamento, los PEAs, financiados hasta ahora créditos extraordinarios. Tanto Ciudadanos como PSOE y Podemos han pedido revisar y auditar estos programas. Pero PP, PSOE y Ciudadanos quieren, además, impulsar la inversión en ellos y proponen la creación de una ley para controlar ese gasto.
Los de Iglesias, por su parte, proponen habilitar “un grupo de expertos que estudien un diseño de las fuerzas Armadas más acorde con las necesidades de España», de cara a una «potencial redimensión de las Fuerzas Armadas acorde» con esas necesidades para “hacer viable el presupuesto de Defensa”. Izquierda Unida pide un mayor control y transparencia en el gasto militar para evitar el “fraude e improvisación en el gasto militar”.
Estructura interna
Una de las propuestas del bloque de “modernización-actualización” de Ciudadanos es la elección del Jefe del Estado Mayor de la Defensa, que -si triunfa su propuesta en las urnas- pasaría a ser elegido en el Congreso y estaría en el cargo cinco años como máximo.
Los socialistas ven conveniente abordar un «plan de reestructuración orgánica y de infraestructuras de la Defensa para fijar las capacidades militares que requiere la Defensa nacional hasta 2025 y las necesidades consiguientes de cuadros de mando, tropa y marinería, personal civil y reservistas».
La eliminación de los mecanismos subjetivos de evaluación para ascender o consolidarse en un empleo es un aspecto importante para Podemos, Ciudadanos y PSOE. La formación morada propone también la modificación de la ley de derechos y deberes de los miembros de las FAS para regular derechos fundamentales como el de reunión y manifestación.
Podemos dedica un amplio apartado para hablar de igualdad en las Fuerzas Armadas, en el que propone abordar “las lagunas legales existentes en el Código Penal Militar”, así como garantizar una mayor presencia de mujeres en altos mandos.
Una de las novedades que introduce el PP es agilizar los procesos de nacionalización de extranjeros que sirvan en las fuerzas armadas.