Artur Mas no ha tenido más remedio que dar «un paso al lado», derrotado por la insistencia de la CUP en que él no fuera el presidente de la Generalitat. La viabilidad del pacto entre las dos formaciones independentistas Junts pel Sí y la CUP pasaba por que rodara la cabeza del hasta ahora presidente de la Generalitat y así ha sido.
Mas ha anunciado un pacto que parte de una «primera decisión que he tomado yo: voy a dar un paso al lado. No me voy a presentar como candidato de Junts pel Sí a la reelección a la presidencia de la Generalitat«.
El presidente en funciones ha explicado que se trata de «una decisión muy dolorosa, pero estoy muy tranquilo» ya que «estoy convencido 100% de que los beneficios superarán a los costes», que son muchos, ha apostillado el 'president'. «La gente es más importante que el partido», por eso, ha explicado, «he tomado determinadas decisiones». «Es una cuestión de principios», ha insistido.
El nuevo candidato de JxSí
El pacto al que se ha llegado con la CUP «en las últimas horas» implica la investidura en primera votación de Carles Puigdemont, el candidato convergente de las listas de Junts pel Sí propuesto por el president, según ha dicho él mismo.
Tras anunciar su nombre, Mas ha explicado que Puigdemont es el actual alcalde de Girona, un cargo que ha desempeñado «muy bien». «Sabe lo que es la gestión, el contacto próximo con la gente… Tiene un proyecto de país muy claro», ha sentenciado, de modo que «cuando sea elegido president lo va a poner en práctica con todas sus consecuencias».
El pacto
El hasta ahora presidente de la Generalitat ha dicho que el acuerdo de investidura con la CUP «hace que Jxsí controlará la actividad parlamentaria» en la nueva legislatura. Dos diputados de la CUP «se incorporarán a la dinámica parlamentaria de JxSí», que son los que faltaron a esta formación para tener mayoría por sí sola. De este modo, dos candidatos de los 10 de la CUP votarán la investidura de Puigdemont. Además, ha añadido, la CUP deberá renovar diputados suyos, los más críticos con JxSí.
Mas ha insistido en que este acuerdo se ha fraguado en las últimas horas y ha asegurado que estaba prevista la convocatoria de elecciones, «pero no era el escenario deseado», mucho menos «si se podía llegar a un acuerdo equilibrado y razonable que permitiese empezar a trabajar e ir hacia adelante», ha explicado.
No quiere cargos
El actual presidente en funciones ha hecho hincapié en que no quiere cargos. «Desde el principio dije que era presidente o expresidente. La presidencia de la Generalitat no es una subasta«, ha insistido Mas, en referencia a los «rumores» que decían que podría acceder a algún otro cargo como 'conseller en cap'. Aun así, se ha mostrado a disposición del Parlament y el nuevo 'president' y Gobierno.
Asimismo, Mas ha asegurado que no se retirará de la política y que quiere contribuir a dar solidez a la renovación de CDC, algo que considera «necesario y urgente».