El Estado Mayor de la Defensa y los tres ejércitos ya tienen ya su nueva estructura detallada, unas modificaciones que buscan “racionalizar” su organización, según defiende Defensa, pero que pueden ocasionar “graves daños a los militares».
Así lo ha denunciado la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), que acusa al Gobierno en funciones de aprobar normas “importantes y trascendentes” que van a ocasionar “una grave incidencia negativa en el personal de las Fuerzas Armadas y en sus familias”.
La reorganización, motivada por la racionalización de recursos y la búsqueda de mayor eficiencia, va a “suponer la desaparición y constitución de unidades, seguidas de las correspondientes adaptaciones orgánicas con cambios de destinos forzosos”, para las que no se han previsto “atención y apoyo a militares y familias afectados”.
AUME pide que se informe a la opinión pública de estas modificaciones que, además, “pueden condicionar las actuaciones del nuevo gobierno”.
Nuevas estructuras
Las nuevas normativas han sido publicadas esta semana en el Boletín Oficial del Ministerio de Defensa (BOD), donde se especifican todos los detalles de las nuevas estructuras del Estado Mayor de la Defensa (EMAD) y de los tres Ejércitos.
El texto desarrolla otras normas dictadas por el Ministerio de Defensa durante los últimos dos años, cuyos detalles se conocen ahora en lo referente a cada una de las estructuras y sus niveles inferiores.
Los cambios más llamativos son la supresión y creación de divisiones, brigadas y unidades, en el Ejército de Tierra y la Armada.
Polivalencia
Uno de los aspectos más comentados, dentro y fuera del Ejército, son las modificaciones en la Fuerza Terrestre con la disolución de las brigadas Castillejos de Caballería (Zaragoza) y San Marcial (Vitoria) y la creación de dos divisiones con esos mismos nombres que buscan la “polivalencia y homogeneidad”, explica el BOD.
Ambas divisiones tienen como cometido principal prepararse para constituir de forma rápida y eficaz estructuras operativas, de modo que sus brigadas tengan la mayor “flexibilidad de empleo y sean intercambiables” para tener la suficiente potencia de combate para alcanzar un objetivo en una operación militar. Esta modificación es uno de los aspectos más criticados por la AUME.
Cambios en la Armada
En la Armada, los cambios se han centrado en los sistemas de información y comunicaciones, logística y la reorganización de la fuerza para eliminar duplicidades.
Un aspecto a destacar en la Fuerza es la creación de la 11ª Escuadrilla de Aeronaves, (sistemas aéreos pilotados de forma remota), que se encuadra en la Flotilla de Aeronaves. Su objetivo es complementar a los medios aeronavales existentes mediante de adquisición de datos e información.
Otro cambio significativo a nivel logístico es es el traslado del centro de gravedad del Apoyo Logístico en la Bahía de Cádiz a la Base Naval de Rota, con el fin de mejorar el apoyo a la Fuerza de Acción Naval.
Mandos conjuntos en el EMAD
También ha habido reformas en el EMAD, que integra en la estructura operativa y con dependencia del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), los nuevos Mando Conjunto de Ciberdefensa (MCCD), Mando Conjunto de Operaciones Especiales (MCOE) y el Centro Conjunto de Desarrollo de Conceptos (CCDC).
Otro de los “hitos” es el cambio en la dependencia orgánica de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y el CESEDEN, que hasta ahora estaban en la estructura del Ministerio de Defensa y pasan a depender tanto orgánica como operativamente del JEMAD.
Ejército del Aire
En el caso del Ejército del Aire, no se incluyen “muchas modificaciones de la regulación anterior”, como explica en su página web, pero se incide en que la nueva organización asegura la existencia de «una gran fuerza con una gestión eficiente». Se mantiene la estructura de Cuartel General, Fuerza Aérea y Apoyo a la Fuerza.