La Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas ASFASPRO, a la que están asociados unos 3.000 militares, ha abandonado el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas.
Denuncian incumplimiento de las funciones, falta de avances en los acuerdos alcanzados en los plenos, irregularidades y la “poca o nula disposición” de los representantes del Ministerio de Defensa para afrontar los problemas planteados por las asociaciones, según una nota publicada este lunes.
“Hay normativas que tienen que ser vistas por el Consejo de las Fuerzas Armadas para poder ser aprobadas, pero en los últimos meses se han sacado varias que no han pasado por el órgano, entonces ¿para qué estamos?”, se pregunta Higinio Fernández, presidente de ASFASPRO.
El Consejo de Personal, que para esta asociación podría ser un buen instrumento para solucionar los problemas de los militares, no ha conseguido resolver algunas de sus demandas, como las modificaciones de la Ley de la Carrera Militar por la que los suboficiales del Ejército de Tierra se ven directamente afectados y a la que sólo se le han “puesto parches” en los últimos tiempos.
De este modo, no se ha resuelto “eficazmente” la homologación de titulaciones que deben acompañar a la trayectoria profesional y, según explica el presidente de ASFASPRO, la respuesta de los representantes del Ministerio siempre es “ya se hará”.
“Recalcitrante inmovilismo”
“El Consejo tiene que dar soluciones, no puede llevar asuntos cada tres meses al pleno y no resolverlos. Los temas más graves se han ido dilatando en el tiempo sin llegar a una solución”, explica Fernández.
Desde la Asociación, consideran que la disposición de los representantes del Ministerio de Defensa y de los Cuarteles Generales del Ejército, cuya actitud tildan de “recalcitrante inmovilismo”, no ha sido buena ya que no han aprovechado la “excepcional herramienta” para mejorar “el estatuto y condición del militar”.
Por ello, piden que los representantes de la Administración tengan el “talante adecuado” y que los representantes de las organizaciones no sean “meros convidados de piedra” para justificar que se cumple la ley de derechos y deberes de las Fuerzas Armadas que creó este Consejo.
Desde la asociación profesional, aseguran que siempre han sido “cumplidores” que siempre han trabajado “con los principios de jerarquía y disciplina”, explica el presidente, pese al “estrecho margen de actuación que permite el reglamento”.
Representan a unos 3.000 asociados, pero son muchos más los compañeros que contactan con ellos para resolver algunas de sus dudas y problemas. Durante todo este tiempo, han recogido muchas de sus demandas para llevarlas al órgano de Defensa. «Es un trabajo duro y difícil» del que no han visto resultados, asegura el presidente de ASFASPRO.