La intervención judicial en Vitaldent y demás empresas de Ernesto Colman no impidió que al menos uno de los aviones de su flota, abanderada bajo la marca Privium, siguiera volando. Fuentes de la seguridad aeronáutica consideran altamente irregular que un avión de una compañía con el gerente encarcelado esté volando. El vuelo fue encargado por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), usuaria habitual de este tipo de empresas de aviación privada para trasladar órganos y tejidos con urgencia.
Al menos uno de los aviones, el matriculado EC-LEP, voló la noche de la intervención, según ha podido saber Estrella Digital. Se trata de un avión de la casa Cessna, modelo Citation V, considerado de alta gama en el mundo de los aviones privados.
Privium dispone de cuatro aviones y estaba en vísperas de recibir dos aparatos más, éstos con capacidad transoceánica. Las matrículas de los mismos son EC-JON (que es el que fue intervenido por la Guardia Civil por mandato judicial), un veteranísimo Citation II; el EC-KOP, un Citation XLS; el EC-HGI, también Cessna Citation II y el Citation V EC-LEP que voló fletado por la ONT.
Privium tiene como administrador único a Ernesto Colman, que acapara todos los cargos en la compañía de aviación, según el Registro Mercantil. Al menos dos de los aviones no son propiedad de Colman, aunque sí vuelen bajo la bandera de su compañía. Se trata de dos aparatos propiedad de dos importantes empresarios españoles, con gran renombre en sus áreas. Colman es accionista por medio de la compañía Etmo Investment, según ha podido saber este diario.
En 2013 Privium se alió con Air Europa para que ésta pudiera ofrecer servicios de aviación privada a sus clientes. Según fuentes conocedoras de la operación, Air Europa ponía su vasta cartera comercial y los aviones en uso serían los de Privium. El objetivo era tener disponible un avión privado para sus clientes en un tiempo máximo de 90 minutos.
En el sector aeronáutico ha causado una enorme sorpresa que la actuación judicial y de la Guardia Civil se haya detenido en uno solo de los cuatro aviones que abandera Privium. Lo más sorprendente es que, además fletado por una institución pública como la ONT, vuele un aparato de una compañía con el máximo accionista y en funciones de gerente, director financiero, director de recursos humanos y director comercial, esté encarcelado en una operación de las dimensiones de la llevada por la UCO y el juez en Vitaldent.