El portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, ha anunciado este jueves que su partido no descarta acudir al Tribunal Constitucional si el presidente del Congreso, Patxi López, no fija la segunda votación de la sesión de investidura de Pedro Sánchez a las 48 horas exactas de la primera.
Así lo ha puesto de manifiesto en una rueda de prensa en la Cámara Baja en la que ha advertido de que es la «parte orgánica» de la Constitución la que establece que el tiempo que transcurra entre las dos votaciones deben ser 48 horas justas por lo que, de no respetarse ese precepto, se estará incumpliendo la Carta Magna.
Hernando ha comunicado sus intenciones a López en una carta que le ha hecho llegar y en la que también le exige la convocatoria urgente de una reunión de la Mesa y la Junta de Portavoces del Congreso para aclarar cómo piensa organizar el debate de investidura que, en principio, arrancará el próximo 1 de marzo a las cuatro de la tarde.
Hernando también ha elevado aún más el tono de sus críticas contra el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y ha insistido en que los 'populares' no hablarán con el partido naranja hasta después de la sesión de investidura «fallida» de Pedro Sánchez.
Hernando se ha ratificado en la decisión adoptada por el PP el pasado día 23 cuando, tras una reunión con el partido naranja, emplazaron a los de Rivera a volver a hablar pero después del 5 de marzo, día previsto para la segunda votación de investidura.
«Nosotros estamos dispuestos a dialogar en base a un acuerdo que ha sido bloqueado por Pedro Sánchez», ha comentado el dirigente 'popular', incidiendo en que su objetivo sigue siendo la 'gran coalición' y dejando claro que no apoyarán a Sánchez porque quiere deshacer todas las reformas impulsadas por el PP para sacar a España de la crisis.
«Intentaremos reabrir un diálogo cuanto antes después del día de la marmota, –ha dicho, en referencia a la investidura– pero no votamos a ZP y no vamos a votar a ZPedro, se pongan como se pongan y se ponga quien se ponga».
El portavoz del PP se ha afanado en descalificar tanto el pacto suscrito entre PSOE y Ciudadanos como al líder del partido naranja, a quien ve como el «pichón» del «pacto de impostura» que, a su juicio, han 'vendido' estos dos partidos y que recoge el 90% del programa del PSOE, y «algunas cosas mínimas» de Ciudadanos.
«Estamos ante un teatrillo», ha denunciado, reclamando seriedad y dando por hecho que el líder del PSOE quiere «nuevas elecciones» para volver a ser candidato pese a sus malos resultados. «Quedó cuarto en Madrid y ahora quiere ver si puede quedar tercero o quinto», ha apostillado.