La agrupación parlamentaria de En Marea -integrada en el grupo confederal de Podemos-En Comú Podem-En Marea- ha aseverado este jueves que «no hay acuerdo posible» con el PSOE si mantiene el pacto con Ciudadanos, y ha avisado al candidato socialista, Pedro Sánchez, de que será «el único responsable» del «fracaso» de su partido en el debate de investidura que tendrán lugar la próxima semana, en el que la confluencia gallega votará 'no'.
«Él va a ser el que va a tener que rendir cuentas al conjunto de los españoles», ha advertido la diputada de En Marea y líder de la federación gallega de IU, Yolanda Díaz, en la rueda de prensa que ha ofrecido en el Congreso junto a la portavoz de su agrupación parlamentaria, Alexandra Fernández (Anova), en la que han comparecido arropadas por el resto de diputados de la candidatura de confluencia.
Díaz y Fernández, que han sido las representantes de En Marea en las negociaciones con el PSOE -tanto en las reuniones bilaterales como en la mesa a cuatro con Compromís e Izquierda Unida-, ha justificado de este modo la ruptura de las conversaciones con los socialistas que este miércoles anunció el líder del equipo negociador del grupo confederal, el 'número dos' de Podemos, Íñigo Errejón.
«Estamos sorprendidos porque nos hemos dado cuenta de que no sólo han jugado con nosotros sino con las esperanzas de cambio de este país. Nos han faltado al respeto, sabíamos que estaban negociando con Ciudadanos pero no sabíamos el alcance del acuerdo político y económico de estas fuerzas, que ya son un búnker», ha denunciado Díaz.
En esta misma línea, Fernández ha lamentado que aunque, al igual que sus compañeros de Podemos y En Comú Podem, tenían el «convencimiento» de «llegar hasta el final» en la negociación, finalmente se han visto obligados a romper estas conversaciones porque el PSOE ha decidido, a su juicio, «llevar a cabo un programa de gobierno con Ciudadanos que da continuidad a las políticas del PP».
Los precios de la leche y el astillero de Ferrol, sin respuesta
En Marea ha hecho hincapié en que el acuerdo firmado entre PSOE y Ciudadanos no sólo no responde a las necesidades del país, sino que no atiende tampoco a los problemas que requieren solución en Galicia. La confluencia gallega ya anunció que el sentido de su voto dependía, además del «pacto global de cambio», de una serie de «compromisos con Galicia» que no podían ser obviados.
En este sentido, las diputadas han explicado que el acuerdo, además de no derogar la reforma laboral, la ley mordaza o el artículo 135 de la Constitución, tampoco atiende el problema de los precios de la leche que afectan a los ganaderos gallegos, la demanda de un dique flotante en los astilleros de Ferrol, ni la financiación de la comunidad.
Por todo ello, los gallegos han anunciado su voto en contra a Sánchez en el debate de investidura de la próxima semana, si bien han avisado al líder socialista de que, una vez que pase la que prevén que será una «investidura fallida», puede «rectificar», salir de su «error», y sentarse de nuevo a negociar con las fuerzas «del cambio» renunciado a su acuerdo con Ciudadanos, que lo ven «incompatible».
Preguntadas sobre si el tono que han empleado tanto Podemos como el PSOE en el cruce de acusaciones que han protagonizado desde ayer puede dificultar que se retomen las negociaciones, Díaz ha defendido que ellos no sufren «rencor» y que sieguen con la mano tendida si los socialistas deciden «girar hacia la izquierda».
«Estamos aquí para defender a las gentes de este país. Queremos un formato en el que la mesa de las cuatro fuerza negociadoras se reanude pero en el que se negocie otro programa de gobierno, uno de cambio», ha asegurad Díaz. «Estamos dispuestos a todo pero efectivamente tienen que cambiar de programa de intereses y decir a la gente que quieren un gobierno de cambio», ha apostillado.