El grupo 'popular' en el Ayuntamiento de Valencia ha acusado al equipo de gobierno municipal de llevar a cabo «una persecución y un control» sobre los concejales y asesores de su partido. En concreto, el portavoz del PP en el consistorio, Eusebio Monzó, ha denunciado que este miércoles ha tenido conocimiento de que se está controlando el acceso de estos cargos públicos a las dependencias municipales del grupo.
En un comunicado, Monzó ha explicado que la mayoría de los asesores –muchos de ellos suspendidos cautelarmente de empleo por su imputación en el caso de presunto blanqueo de capitales en el PP de la ciudad, en el marco del 'caso Imelsa'–, al margen de su trabajo de asesoramiento para los concejales, son miembros y vocales de las Juntas Municipales de Distrito o representantes en organismos y entidades municipales por lo que «necesitan seguir accediendo a las dependencias del grupo en momentos puntuales para poder desarrollar estas tareas y funciones de representación».
Monzó ha considerado «preocupante» esta situación que «supone de facto una implícita persecución y un control de las personas que visitan las dependencias del grupo 'popular'». «A pesar de esta presión y este empeño del tripartito en desmantelar y obstaculizar la labor de oposición del PP, no nos vamos a callar, ni conformar, ni por supuesto plegar a prácticas que van contra derechos fundamentales de las personas y que nuestro ordenamiento jurídico recoge y ampara», ha sostenido.
Asimismo, desde el grupo municipal han criticado que estos hechos «contrastan con la política de 'puertas abiertas' y 'paredes de cristal' que pregona el gobierno del alcalde Joan Ribó».
Monzó también ha sostenido que el grupo municipal 'popular' «se va a oponer a estas prácticas que suponen cercenar y menoscabar las tareas de oposición» y «en ningún caso va a renunciar a la defensa de los intereses de los valencianos que depositaron su confianza en las políticas del PP».