El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha cargado este miércoles contra el Gobierno central por llevar tres meses «sumido en la más absoluta parálisis».
«Estaría bien que la política española tomara nota de la política catalana», ha afirmado en la sesión de control al presidente en el Parlamento, horas antes de reunirse en la Moncloa con el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy.
Puigdemont ha resumido así lo que considera la principal diferencia entre la labor de su Gobierno y el desacuerdo de los grupos del Congreso sobre una investidura: «100 días de orden al lado de 100 días de ruido«.
El presidente ha criticado que el Gobierno haya llevado en los últimos meses muchos iniciativas del Gobierno y del Parlamento al Tribunal Constitucional, y lo ha acusado de convertirse en un Ejecutivo que «no hace y no deja hacer».
Ha expuesto que algunos discursos de PP y C's escuchados este miércoles en el Parlament dejan entrever que pronto habrá elecciones generales, y ha lamentado que la falta de acuerdo en el Congreso «no ha sido buena para nadie», incluida Cataluña.
Puigdemont, que se reunirá a las 17 horas con Rajoy, ha avanzado que está dispuesto a hablar de todo, aunque esto no signifique llegar a acuerdos en todo: «Celebro que La Moncloa no ha puesto ningún veto a hablar de temas».
El portavoz de C's en la Cámara, Carlos Carrizosa, le ha pedido ir a la reunión dispuesto a acuerdos en financiación e infraestructuras, y le ha instado a aparcar la hoja de ruta independentista.
Ha puesto de ejemplo el pacto «sin sectarismos» C's-PSOE para introducir reformas que necesitan todos los españoles, incluidos todos los catalanes, ha argumentado
Puigdemont ha explicado que acude al encuentro con «razonable escepticismo, prudente optimismo y corrección institucional», y ha replicado a C's que la Generalitat siempre ha apostado por reformas de la financiación autonómica, pero que después no se han cumplido por parte del Estado.
El líder del PP catalán, Xavier García Albiol, le ha pedido que formule demandas amparadas por la Constitución y el Estatut y asumibles por el Gobierno central, y el presidente le ha replicado que la capacidad de asumir demandas de Rajoy es «escasa».
Albiol ha acusado a la Generalitat de bloquear la relación con el Estado en los últimos años, y opina que este miércoles está en manos de Puigdemont cambiar esta tendencia: «Pidiendo está reunión ha hecho un gran paso. No lo desaproveche. La política catalana necesita serenidad, medida, equilibrio y cordura».
El líder parlamentario de JxSí, Jordi Turull, se ha mostrado muy crítico con el Gobierno central, al que acusa de no dar margen de maniobra a la Generalitat, y ha advertido: «El Govern y JxSí no nos dejaremos intimidar».