Izquierda Unida no consigue cuórum ni para decidir si abre o no un proceso de negociación con otras fuerzas políticas, entre ellas Podemos, para buscar la confluencia electoral de cara a los comicios del próximo mes de junio. Este miércoles, la Presidencia Ejecutiva Federal (PEF), el máximo órgano entre congresos, se reunió en la sede federal madrileña durante algo más de cuatro horas para tomar una decisión que ni de lejos cuenta con el apoyo unánime de la formación. Ni siquiera está claro el número exacto de los 75 miembros que componen el órgano de dirección de IU que participaron en esta decisión.
Este miércoles, IU comunicó de manera oficial que la dirección aprobó por 35 votos a favor y 3 abstenciones abrir la negociación en el marco de una coalición electoral de ámbito estatal. Es decir, de ser cierto habrían votado 38 de los 75 miembros, o lo que es lo mismo, el 50%.
Sin embargo, uno de sus miembros, el diputado autonómico catalán, Joan Josep Nuet, dio otras cifras muy distintas. Según este parlamentario, del círculo próximo a Alberto Garzón, la decisión la tomaron sólo 27 personas, es decir, el 36% de la dirección. De ser así, habría contado sólo con el beneplácito de un tercio de la Presidencia Federal. Fuentes cercanas a IU no creen que se trate de «un error». «Tiene toda la pinta de que la cifra real es la anunciada por Nuet», señalan.
La Presidencia d @iunida acuerda x 25 votos Si, 0 No y 2 Abstenciones, negociar 1 acuerdo con @ahorapodemos pic.twitter.com/kCJLGWYSrr
— NUET (@NUET) 27 de abril de 2016
Ahora bien, las mismas fuentes también alertan de que da igual si participó en esta decisión un 50% o un 36% de la Presidencia Ejecutiva Federal. “Cuando un partido pretende cambiar su esencia qué menos que lo apruebe al menos el 80% de la organización”, insisten las mismas fuentes, que consideran de “risa” esta votación, que se ha producido tras los contactos iniciales a nivel exploratorio de los últimos días entre representantes de las direcciones de Izquierda Unida y Podemos. «Esta votación ha sido anormal porque lo habitual cuando se reúne este órgano es que acudan todos los integrantes de la Presidencia», resaltan.
Las cifras de asistencia sugieren que sólo han acudido a la votación los miembros que tenían decidido votar 'sí' a la alianza con Podemos, además de los miembros de Izquierda Abierta, que se abstuvieron. Y que la mayoría habría preferido no estar presente para no contrariar la consigna de la dirección.
Las abstenciones han correspondido a los representantes de Izquierda Abierta, el partido de Gaspar Llamazares, que pedían primarias abiertas para configurar las listas y una comisión plural para negociar con Podemos. El sector del coordinador general, Cayo Lara, por el momento, se ha alineado con el de Garzón y ha votado a favor.
Este sector ha anunciado que presentará a la XI Asamblea de IU prevista para junio un candidato alternativo a Alberto Garzón, pero hasta este punto sí están de acuerdo: coalición sí, absorción no. No obstante, la inminencia de las elecciones generales deja ahora en el aire la celebración del cónclave.
Hasta la fecha, la dirección de IU insiste en que el resultado de las negociaciones «debe garantizar el reconocimiento mutuo y la autonomía de ambas organizaciones». Una intención en la que no todos los miembros de la organización confían. Por el momento, está prevista la convocatoria de una consulta 'on line' y presencial a las bases de la organización que tendrá lugar entre el 2 y el 4 de mayo para implicar expresamente a la militancia de forma directa en esta decisión.