El mismo día en el que arranca oficialmente la precampaña para las elecciones del 26 de junio, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha publicado su encuesta Postelectoral de las Elecciones Generales de 2015, en la que el 78,4% de los encuestados asegura que no habría cambiado su voto de haber sabido los resultados que arrojaron las urnas el 20 de diciembre.
La encuesta, realizada entre el 7 de enero y el 19 de marzo, en mitad de las negociaciones entre partidos, puede dar pistas sobre lo que puede ocurrir el próximo 26 de junio. Y si se cumplen las previsiones de los votantes, no habrá muchos cambios, aunque el momento es inédito en la democracia española. El Cis ha publicado el sondeo a punto de arrancar una nueva campaña electoral tras cuatro meses de negociaciones entre partidos que han terminado sin acuerdo.
Con la convocatoria de elecciones firmada este martes por el rey, se abren las preparaciones para la nueva convocatoria y el CIS indica que las campañas electorales no suscitan un gran interés entre los españoles. Casi la mitad de los encuestados la siguió con «poco» o «ningún» interés (el 32,1% y el 16,7%, respectivamente). Pese a ello, también casi la mitad (el 43,5%) cree que está mejor informado sobre política que la mayor parte de la gente.
Pese a la escasa importancia que se le da a los actos de campaña y apariciones mediáticas de los responsables de los partidos, el 26,9% de los votantes reconoce que decidió su voto en campaña, casi el mismo porcentaje de encuestados que votó “con ciertas dudas” (el 24,6%).
Rajoy, el peor valorado
Nueve de cada 10 españoles no están conformes con la situación política del país. El 33,9% la califica de “regular”, el 38,5% cree que es mala y el 22,7% es muy mala. De hecho, sólo uno de los líderes de los partidos nacionales aprueba. El líder mejor valorado por los españoles es Alberto Garzón, que consiguió un aprobado justo con un 5,23 sobre 10.
Con más de medio punto de ventaja y ya suspenso le sigue Albert Rivera, que consigue un 4,55. Pedro Sánchez, con un 4,19, apenas saca una décima a Pablo Iglesias, que obtiene un 4,06. El líder de UPyD en el 20D, Andrés Herzog, que no es conocido por el 61,7% de los encuestados, se queda con un 3,75. La peor nota es para el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que es valorado con un 3,43 sobre 10 por los españoles.
Sin embargo, las notas de los líderes de los partidos no se corresponden con la cercanía que sienten los votantes por sus formaciones. Sólo el 6,6% se sienten cercanos a Izquierda Unida-Unidad Popular y el 8,3% a Ciudadanos, mientras el 24,9% de los encuestados se inclinan por el PP; el 23,8%, por el PSOE y el 17,1%, por Podemos.
Aún así, el 19,9% de los votantes tuvieron dudas a la hora de escoger su papeleta. De ellos, el 16,9% dudaron entre elegir a PP o Ciudadanos y el 11,6% no tenían claro si escoger a PSOE o Podemos cuando votaron. La decisión entre PSOE y Ciudadanos también tuvo en dudas al 9,6% de los electores.
Pero los ciudadanos tienen una opinión bastante negativa de la actividad de los políticos y de su relación con los ciudadanos. Pese a que el 50,7% cree que con su voto puede influir en lo que pasa en la política, el 74% cree que los políticos no se preocupan por lo que ellos piensan y el 73% cree que buscan sus intereses personales.
El 40,8% de los encuestados cree que la situación económica de España es mala y que las elecciones del 20 de diciembre no cambiaron mucho esa situación. El 43,4% cree que la economía española se mantuvo igual que antes.