El Sindicato de Mossos d'Esquadra (SME) ha emplazado este jueves a la CUP a condenar la violencia en el barrio de Gràcia, que ve «injustificable», y ha avisado que es una «vergüenza» que alguien pida la disolución de la unidad antidisturbios, que es la que defiende a los ciudadanos durante los disturbios.
En declaraciones a Efe, el portavoz del SME, Toni Castejón, ha indicado que los alborotos que ha habido durante tres noches seguidas en el barrio de Gràcia de Barcelona, tras el desalojo el lunes pasado del «banco expropiado», no son una disputa por un local, sino que es un «problema de violencia».
Para el SME, integrado en la Trisindical de los Mossos d'Esquadra, los actos de violencia que ha habido en Gracia son «indefendibles». «Es una vergüenza que alguien los defienda», ha indicado Castejón.
En este sentido, el portavoz del sindicato ha emplazado a la CUP a condenar la violencia, lo que interpretaría como un acto de «responsabilidad» por parte de la formación anticapitalista.
«Exigimos la implicación de todos los partidos para que condenen de forma contundente a los violentos», ha agregado Castejón.
Según el sindicato, es «increíble» y una «vergüenza» que desde algunos sectores se pida la disolución de la unidad antidisturbios de los Mossos d'Esquadra, que «son los únicos que defienden a los ciudadanos ante los violentos»
EFE