Miles de personas se manifiestan hoy por el centro de Barcelona para protestar contra el Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro aprobado por el Gobierno en funciones, y para mostrar a la UE el rechazo ciudadano a esta iniciativa y a la disminución del caudal en el tramo final del río.
La Plataforma en Defensa del Ebro ha convocado la manifestación, que ha partido de la Plaza Universitat de la capital catalana y transcurre de manera festiva por el centro de la ciudad.
A la protesta, que se celebra coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente, se han adherido diferentes entidades, asociaciones ecologistas, sindicatos, la Generalitat y todos los partidos políticos catalanes, excepto PP y C's.
Tres tractores encabezan la manifestación, seguidos de una gran pancarta con el lema «El Ebro sin caudal es la muerte del Delta» y una gran tubería anudada, símbolo del movimiento antitrasvase, portada por la cabecera de la marcha.
Muchos de los participantes visten la camiseta azul con el dibujo de la tubería anudada y llevan globos también azules con el lema «Lo riu es vida», mientras corean consignas como «No al trasvase, el río es vida» o «Se nota, se siente, el Ebro está presente».
Bandas de música y manifestantes con tambores amenizan la marcha, que tiene previsto finalizar en la Avenida de la Catedral.
A la manifestación asisten, entre otros, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, el conseller de Territorio, Josep Rull, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
EFE