El sector crítico del PSOE ya prepara el relevo de Pedro Sánchez. “Si logra unos resultados aceptables, que le permitan formar gobierno, todo el partido le apoyará. Pero si no es así, una gran mayoría de la formación le pedirá la dimisión”, advierten fuentes internas, que ya han asumido que la transición no será tranquila.
«Creemos que se va a resistir», insisten las mismas fuentes, conscientes de que si los resultados del 26J son similares a los que las encuestas pronostican, Sánchez no dimitirá motu proprio. Los últimos sondeos internos en manos de la dirección ya evidencian “un frenazo en la caída en picado” que han experimentado en los últimos meses. Internamente existe el convencimiento de que no habrá ‘sorpasso’ (al menos no en escaños) de Unidos Podemos al PSOE.
Aunque ésta tampoco será la salvación de Sánchez. El pasado 20D ya pasó a la historia como el candidato socialista que obtuvo los peores resultados electorales en la historia de la formación: un 22% de los votos y 90 escaños. Hoy las encuestas no le dan más de un 21% de los votos y la horquilla de escaños oscila entre los 78-85. La previsión de poder formar gobierno no es optimista.
Y por ello, el sector crítico del PSOE ya está con las armas en alto. Oficialmente no hay ninguna duda de que todos los esfuerzos están puestos en la recta final de la campaña. Pero la realidad es que la mayoría ya piensa en el 27J. Tanto es así, que el procedimiento a seguir ya parece claro.
Si Sánchez, en contra del pronóstico que manejan los críticos, finalmente sucumbiera a la presión que los barones regionales podrían ejercer sobre él y presentara su dimisión tras los comicios del 26J, el primer paso sería nombrar una gestora hasta la celebración del próximo Congreso. Uno de los nombres que suenan con más fuerza para presidirla es el secretario general de la FSA-PSOE, Javier Fernández.
Sin embargo, fuentes socialistas aseguran a Estrella Digital que el aparato de Ferraz ya está buscando “parapeto” para Sánchez. En caso de que finalmente no le quede más remedio que dimitir, la idea sería colocar al frente de la gestora a Patxi López, un hombre de su cuerda. Una operación a la que las fuentes consultadas “no dan ninguna posibilidad de éxito”, puesto que cuando Sánchez deje la secretaría general lo hará “derrotado” y sin ninguna posibilidad de influencia.
Ahora bien, si el actual secretario general del PSOE se resiste, tal y como sospecha el sector crítico, entonces el procedimiento de sustitución se alargaría más, aunque el desenlace sería el mismo. La opción que existe es que el Comité Federal pase directamente a la acción. “Ahí Pedro está en minoría”, advierten las fuentes consultadas. El Comité Federal “forzaría” la convocatoria de “un congreso inmediato”. En estos momentos, el cónclave está previsto para octubre, pero según las fuentes consultadas se adelantaría “a septiembre”.
La 'resurreción' de Madina
Una de las principales incógnitas en el seno interno de la formación es el sustituto de Sánchez. Además de los habituales en las quinielas (la presidenta andaluza, Susana Díaz, y el castellano manchego, Emiliano García-Page), hoy ha vuelto a surgir con fuerza un nombre que estaba adormecido: Eduardo Madina, el perdedor de las primarias frente a Sánchez. “Un nuevo líder para esta etapa de transición”, advierten fuentes socialistas, que advierten de movimientos en la sombra.
Su función sería “recomponer el partido”. “Los barones mejor posicionados en la pugna no parecen dispuestos a tomar las riendas del partido en este momento”, advierten fuentes cercanas al PSOE. Aunque fuentes del sector crítico insisten en que la 'lideresa' Susana Díaz no tomará una decisión definitiva hasta después del 26J. “Hoy está centrada en ganar las elecciones en Andalucía y obtener el mejor resultado posible para el PSOE”, donde las encuestas también anuncian tormenta.
En cualquier caso, los halagos a Madina en las últimas semanas no han cesado. Ha pasado del ostracismo a la primera línea política en cuestión de días. Y eso ha activado las alarmas. Susana Díaz, García-Page, el extremeño Guillermo Fernández Vara y el Aragonés, Javier Lamba, han lamentado que Madina volviera a ocupar el número 7 de la lista por Madrid y por lo tanto sus opciones de entrar en el Congreso vuelvan a ser prácticamente nulas.
Formación de gobierno
En paralelo a todo este proceso se produciría la negociación de la formación del nuevo gobierno; y en el PSOE aún no está claro quién la tutelará. Si Pedro Sánchez obtiene “buenos resultados y opciones de gobernar”, el partido permitirá que el proceso lo lidere él. Pero si no es así, las opciones serán dos. Si Sánchez dimite, lo hará el nuevo presidente de la gestora. Si finalmente se resiste, “las negociaciones las tutelará el Comité Federal”, advierten desde el sector crítico.
Hace cuatro meses que Sánchez rozó el cielo de La Moncloa, pero hoy esta opción parece remota. En el mejor de los casos para los socialistas (que no haya ‘sorpasso’ ni en votos ni en escaños), las encuestas vuelven a alertar de que ni el bloque de derechas, ni el de izquierdas suma una mayoría. Es decir, sus opciones volverían a ser las mismas: intentar unir a Ciudadanos y Podemos, optar por los independentistas o abstenerse ante el PP.
En el caso de que el ‘sorpasso’ finalmente se produzca, la decisión será aún más complicada. ¿Hará presidente a Pablo Iglesias? El discurso oficial niega esta posibilidad. “Ni a Iglesias ni a Rajoy”, advierten constantemente. Las opciones de Sánchez tras el 26J son escasas, pero las de la organización no serán muchas más. El fantasma de las terceras elecciones también cierne sobre Ferraz.
Elsa S. Vejo