El astronauta español Pedro Duque ha lamentado hoy que España sólo invierta «un tercio de lo que debería en ciencia y tecnología», tras ser investido «doctor honoris causa» por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la Universidad Nacional a Distancia (UNED).
«Tenemos que apostar mucho más por la inversión y el desarrollo en este tipo de investigaciones si de verdad queremos incrementar nuestra competitividad», ha indicado a EFE Duque, actual responsable de Revisión de Proyectos Futuros en la Agencia Espacial Europea (ESA).
Además del esfuerzo industrial, Duque ha reclamado apoyo educativo, mediante un mayor impulso de las carreras universitarias y de iniciativas pioneras en ingenierías y ciencias experimentales.
«Lo que está en juego no es sólo la riqueza material, sino el acceso al conocimiento, con todo lo que eso significa», ha asegurado el ingeniero, tras mostrar su preocupación acerca de que España y otros países europeos puedan quedar atrás respecto al avance científico de Estados Unidos y China.
Duque ha recibido el «doctor honoris causa» en reconocimiento a su «profesión vocacional que requiere grandes conocimientos multidisciplinares y una alta dosis de autosuficiencia», según ha indicado durante su discurso su padrino en este acto, el profesor de Ingeniería de Sistemas y Automática en el Departamento de Ingeniería Eléctrica, Electrónica y de Control de la UNED, Francisco Mur.
Mur ha insistido en la capacidad de Dique para «ampliar el límite de lo conocido, de la ciencia y la tecnología», trabajando en la frontera de «lo que es actualmente alcanzable y tecnológicamente posible».
Tras resumir los méritos profesionales y científicos de Duque, ha calificado de «destacable» su capacidad en el ámbito de la investigación, ejercida a través de una «larga trayectoria que sirve de ejemplo de tenacidad en España».
Duque es ingeniero aeronáutico por la Universidad Politécnica de Madrid e investigador en centros de Colonia (Alemania), Houston (Estados Unidos), Noordwijk (Holanda) y en la Ciudad de las Estrellas (Rusia), además de su cargo actual en la Agencia Espacial Europea.
En 1998 viajó al espacio como miembro de la tripulación del transbordador «Discovery» en una misión de nueve días de duración, organizada conjuntamente por las agencias norteamericana (NASA), japonesa (NASDA) y europea, que llevó a bordo más de 80 experimentos científicos, de los cuales 29 se desarrollaron bajo la tutela del propio Duque.
Gracias a un acuerdo entre la Agencia Espacial Rusa (Roscosmos) y la ESA viajó de nuevo en la «Misión Cervantes» a bordo de una nave Soyuz, que le condujo hasta la Estación Espacial Internacional, en donde permaneció durante ocho días, ocupándose de experimentos de física, biología, nuevas tecnologías, educación y observación de la Tierra.
Tras dirigir la empresa Deimos Imaging del grupo industrial español Elecnor durante cinco años -en el curso de los cuales consiguió poner en órbita el primer satélite español de observación utilizado en mejoras para agricultura, detección de incendios y control de bosques-, regresó a la ESA en octubre de 2011.
Entre otras distinciones, Duque ha recibido la Gran Cruz al Mérito Aeronáutico, Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional (España) y la Orden de la Amistad (Rusia), además de ser miembro de la Real Academia de Ingeniería en España.
EFE