Andalucía ha realizado el primer trasplante internacional en grandes quemados de piel humana autóloga fabricada con sus células propias. La intervención ha permitido que la piel se regenere y ha contribuido a la supervivencia de la paciente, una joven de 29 años que tenía el 70% de su cuerpo quemado.
El consejero de Salud, Aquilino Alonso, y el consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, han comparecido este lunes en una rueda de prensa junto a los profesionales e investigadores que han participado en este caso. En esta comparecencia el doctor Miguel Alaminos ha destacado que este trasplante representa un «hito en la sanidad» tras una década de trabajo de ingeniería tisular para crear este tipo de estructura similar a la piel.
Esta mujer se ha convertido en la primera receptora de este tipo de trasplante que reduce las posibilidades de infecciones y aumenta la recuperación de la paciente que se encontraba en estado crítico. La piel trasplantada ha sido hecha por células madre de la paciente y con agarosa, una sustancia química obtenida de un alga marina -hasta ahora no usada en injertos de piel- que mejora la elasticidad de la piel artificial, aumenta su grosor para poder manipularla y cumple los estándares europeos de fabricación de medicamentos.
Los 80 investigadores y médicos han fabricado 5.900 centímetros cuadrados de piel a partir de dos láminas de piel de cuatro centímetros cuadrados cada una. Con esta nueva piel se ha podido cubrir la totalidad de las partes del cuerpo quemadas. Para llevar a cabo este trasplante han sido necesarias dos intervenciones quirúrgicas.
Se trata del primer trasplante internacional de estas características en grandes quemados, ya que existen otras técnicas empleadas en Estados Unidos con piel artificial. La diferencia es que este tratamiento solo se puede aplicar en pequeñas áreas quemadas y no se fabrican con las células del paciente, por lo que genera rechazos y amplía las posibilidades de infección.
En la actualidad, la paciente evoluciona favorablemente, camina sin ayuda y tiene buena movilidad tanto en brazos y piernas. En tres o cuatro semanas se le podría dar el alta si no hay incidentes ni complicaciones. Los diferentes análisis muestran que la piel se está implantando poco a poco de manera adecuada y desempeñando las funciones correctamente, según informa el equipo médico responsable.
Por otro lado, Aquilino Alonso y Antonio Ramírez de Arellano han adelantado que ya se está empezando a trabajar en fabricar sustitutos cutáneos alogénicos no procedentes del propio paciente como sustitutos cutáneos tras sufrir quemaduras de gravedad en las primeras horas.
Andrea Morea