Si alguien pensaba que tras el Comité Ejecutivo Nacional del PP el escenario político quedaría un poco más despejado estaba muy equivocado. El presidente 'popular', Mariano Rajoy, ha añadido más leña al fuego: «nosotros no hemos hablado de condiciones, sino que mis colegas lo que han aceptado es que la dirección del partido negocie con Ciudadanos para intentar alcanzar un acuerdo de investidura».
Esta sorprendente declaración la ha realizado Rajoy en la comparecencia posterior al Comité Ejecutivo Nacional reunido este lunes en la sede nacional del PP. Y ha insistido dos veces en ello. De hecho, Rajoy ha llegado a asegurar que en ningún momento el objetivo de la reunión de este lunes era hablar de las seis condiciones que la semana pasada el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, le impuso para comenzar a negociar.
«¿Quién ha dicho eso?», ha llegado a preguntar de manera desafiante Rajoy a los periodistas que insistían sobre esta cuestión. Ha negado descaradamente la realidad. Aunque la hemeroteca le desmiente vilmente. «He explicado al señor Rivera que tengo que someter el documento al comité Ejecutivo Nacional. Como ustedes podrán comprender yo no puedo tomar esta decisión solo». Esta fue la declaración textual que hizo tras su encuentro de la semana pasada con el líder de Ciudadanos.
Entonces, no quiso hacer más valoraciones sobre las condiciones de Rivera. Dijo que daría «todo lujo de detalles» cuando hablara con «sus colegas». Pero de nuevo se ha escaqueado de los focos. No ha hablado de condiciones, pero tampoco de fecha de investidura. A Rajoy no le gusta la presión y hoy lo ha vuelto a demostrar. Él quiere mandar en estas negociaciones.
«Detalles menores»
Aunque también ha dejado claro que sin el PSOE no hay mucho más que hablar. El líder del PP no está dispuesto a seguir los pasos del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y firmar un pacto con Albert Rivera que no le lleve a ningún sitio. Así como tampoco parece dispuesto a presentarse a una investidura fallida, aunque tampoco lo ha dejado claro.
Su objetivo ahora, ha dicho, es hablar con Sánchez. También lo hará con Rivera, aunque tampoco ha demostrado mucho interés. «Eso son detalles menores», ha llegado a decir Rajoy, que ha vuelto a insistir en que si no consigue sacar al PSOE del «no» la única salida será una nueva convocatoria electoral, que su partido no quiere.
De hecho, Rajoy tampoco ha dado por cerrado el acuerdo con Ciudadanos. Según su interpretación, lo que su Comité Ejecutivo Nacional le ha permitido es emprender una negociación con Ciudadanos, pero no aceptar ninguna condiciones. «Si al final hubiera acuerdo…», ha dicho Rajoy, que ha rematado con una declaración aún más impactante: «mientras no se nos pida nada que perjudique al interés general de los españoles, nosotros podemos aceptar muchas cosas o no».
Rajoy no aclara su hoja de ruta
Rajoy ha asegurado que el PP tiene tres objetivos: formar gobierno, no repetir elecciones y empezar a gobernar sin estar en funciones. Aunque de nuevo se ha negado a aclarar cómo lo hará. Se supone que en las próximas horas llamará a Sánchez y Rivera para volver a reunirse, pero no ha dicho nada más.
Así que la situación vuelve al inicio de todo. Vuelven a abrirse contactos sin saber si será posible que alguien ceda. Rajoy sigue sin mostrar sus cartas y Sánchez ha vuelto a insistir en el «no» de su partido a un gobierno del PP. Rivera dejó bien claro que él no negociaría hasta que no se fije fecha de investidura y se acepten sus condiciones. Pero todo sigue igual.
El líder socialista ya ha avisado de que si Rajoy no fija fecha en los próximos días presentará una iniciativa en el Congreso con la que intentará obligar a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, a hacerlo.
Elsa S. Vejo