La presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha decidido este jueves que el debate de investidura comience el próximo martes 30 por la tarde con la intervención en solitario de Mariano Rajoy, con una fórmula que criticó el PP cuando se sometió Pedro Sánchez.
La Mesa del Congreso se ha reunido para aprobar, finalmente por unanimidad, la distribución de los grupos parlamentarios en el hemiciclo en la XIII Legislatura y ha dado su visto bueno a la ordenación del debate de investidura al que se someterá Rajoy.
Según ha explicado en rueda de prensa la presidenta del Congreso, el debate comenzará a las cuatro de la tarde con la intervención del candidato, en una decisión propia tras analizar los «pros y los contras» y dar tiempo a los grupos para analizar las propuestas del candidato.
Esta fórmula es la misma que decidió el entonces presidente de la Cámara baja en la anterior legislatura, Patxi López, para la investidura de Pedro Sánchez, que tuvo críticas del PP -que incluso registró un escrito de protesta– y de otros grupos parlamentarios.
De esta forma el debate comenzará con la intervención de Rajoy -sin límite de tiempo- y continuará a las nueve de la mañana del día siguiente con las intervenciones de los grupos, las réplicas del candidato y la primera votación.
Si como se prevé, no logra ser investido en la primera votación, para lo que requiere mayoría absoluta, la segunda, en la que le bastaría la mayoría simple, tendría lugar 48 horas después, el viernes día 2 de septiembre.
Los portavoces de todos los grupos han mostrado su respeto por la decisión de Pastor, aunque la vicepresidenta segunda del Congreso, la socialista Micaela Navarro, ha admitido la «sorpresa» porque el PP criticó que Patxi López decidiese la misma hora para el debate de investidura de Pedro Sánchez. Ha recordado incluso que los ‘populares’ presentaron un escrito protestando por esa hora elegida.
También la representante de Podemos y vicepresidenta cuarta del Congreso, Gloria Elizo, ha lamentado que el horario elegido «desenfoca» lo que debería ser un «debate parlamentario rico» con una discusión más «fluida».
Por otra parte, la Mesa del Congreso ha acordado por unanimidad el reparto de escaños, en una decisión que no fue posible en la anterior reunión de la Mesa, el pasado 9 de agosto, por la disconformidad de Podemos, partido que este jueves ha accedido aunque siga sin gustarles, como ha señalado la miembro de la Mesa de este partido Gloria Elizo.
En el reparto decidido, Podemos se coloca junto al del PSOE y cuenta solo con tres escaños en primera fila -la principal razón por la que protestaba este partido- para ir extendiéndose hacia arriba. En la parte central de la grada, en quinta fila, queda ERC, al lado del Grupo Mixto.
Los cinco diputados del PNV se sitúan también en esa grada pero en primera y segunda fila, junto a los diputados de Ciudadanos a un lado y con más representantes de Podemos detrás. La presidenta del Congreso ha mostrado su satisfacción porque la decisión se haya tomado por unanimidad y el respaldo de la amplia mayoría de los grupos.
Por otro lado, Pastor ha avanzado que, tras el debate de investidura, el próximo 6 de septiembre el Congreso comenzará su actividad a máximo rendimiento con la fijación de plenos, comisiones y otras actividades.
Esta ha sido una cuestión solicitada por todos los grupos parlamentarios, ya que el Congreso debe funcionar a pleno rendimiento al margen del resultado del debate de investidura, como han subrayado los portavoces de PSOE, Podemos y Ciudadanos.
Redacción