En el pleno municipal que tendrá lugar este viernes en el Ayuntamiento de Barcelona, los tres concejales del grupo municipal de la CUP llevarán la propuesta de retirar la estatua que homenajea a Cristóbal Colón situada al final de a Rambla, junto al puerto de la capital catalana. En el texto de proposición, que se someterá a votación con motivo de la celebración del Día de la Hispanidad, solicitarán además que el 12 de octubre sea laborable en la ciudad y la retirada de banderas españolas y símbolos monárquicos de los edificios municipales, entre otras medidas.
Respecto a la estatua de Colón, uno de los monumentos más representativos de la ciudad, la CUP pide quitar “todos los ornamentos de la base de la columna que hacen enaltecimiento de la conquista de América y su museización por su interpretación histórica”. La intención es sustituirla por una obra que simbolice la resistencia americana durante el proceso de colonización “contra el imperialismo, la opresión y la segregación indígena (y afroamericana)”
Josep Garganté, concejal de la CUP, escribía en la tarde de ayer en su cuenta de Twitter que “cuando Colón y sus marineros desembarcaron portando espadas y hablando de forma rara, los nativos arawak corrieron a darles la bienvenida, a llevarles alimentos, agua y obsequios. Después, Colón escribió en su diario: ‘(…) No tuvieron ningún inconveniente en darnos todo lo que poseían (…) Serían unos criados magníficos. Con cincuenta hombres los subyugaríamos a todos y con ellos haríamos lo que quisiéramos”
A las medidas tomadas por la formación se suma la eliminación de otra estatua, la escultura del esclavista Antonio López. El monumento del marqués Comillas, que se encuentra situado en la Via Laietana, frente al edificio de correos, sería sustituido por uno que represente a las víctimas de esclavitud. El grupo municipal también pide que la Generalitat no autorice manifestaciones ni actos fascistas en la ciudad.
Beatriz Jiménez