“Quien a hierro mata, a hierro muere”. Es el resumen que muchos socialistas hacen de lo ocurrido en Ferraz hace 10 días. La forma de derrocar a la Ejecutiva e imponer una gestora, un método muy criticado por los ‘sanchistas’, ha sido una práctica más que habitual de la antigua dirección socialista y su exsecretario de Organización, César Luena, para controlar a los críticos, según denuncian muchos socialistas desde Madrid a Navarra, pasando por Castilla y León y La Rioja.
“No me alegro de lo que le ha pasado a Pedro Sánchez y a su Ejecutiva porque han sufrido lo que sufrí yo”, explica Inmaculada Ortega, exsecretaria general del PSOE de Logroño. El caso de Logroño resulta paradigmático ya que fue precisamente Luena, también secretario general del PSOE en La Rioja, el que destituyó a la Ejecutiva en 2013 “por diferencias de criterio político”.
En 2011, la agrupación de Logroño, que supone la mitad de la militancia de La Rioja, comenzó a estar dirigida por una Ejecutiva no afín al secretario general en La Rioja, con Inmaculada Ortega a la cabeza. Tras dos años de tiranteces, Luena decidió defenestrarla y colocar una gestora controlada por él. También allí Luena echó el cierre a la sede socialista, a la que los antiguos dirigentes no pudieron acceder, como ocurrió tiempo después a Tomás Gómez en Madrid o Antonio Pradas en Ferraz.
En ese momento, Luena no tuvo en cuenta el hecho de que esa dirección del PSOE de Logroño hubiera ganado unas primarias con un gran apoyo de la militancia, un argumento al que él mismo apeló para tratar de salvar a la Ejecutiva de Sánchez. Tampoco se acordó de haber utilizado el sistema de gestoras cuando el pasado 28 de septiembre (tras la dimisión de 17 miembros de la Ejecutiva Federal del PSOE), defendió que la creación de gestoras no se contempla en las normas del partido y pidió la convocatoria de un Comité Federal y un Congreso Extraordinario.
Tres gestoras en pueblos navarros
Algo similar ha ocurrido en varios pueblos de Navarra, donde también se destituyeron ejecutivas, disolvieron agrupaciones e impusieron gestoras por ser contrarias a la posición oficial. Todos los socialistas explican que las famosas gestoras son necesarias en situaciones excepcionales pero durante la dirección de Luena en la Organización del PSOE “se han usado para controlar al partido”.
“La única manera de que nadie se mueva, de controlar al partido, ha sido cortar la cabeza al sector crítico”, explica a Estrella Digital Amanda Acedo, exsecretaria general del PSN en Tafalla. “Hicieron que en el partido los militantes tuvieran miedo a no poder hablar. En cuanto discrepas, van a por ti, son auténticos golpes de mano”, concluye.
Tafalla es uno de los lugares donde más polémica se creó tras la expulsión “fulminante” de dos concejales en septiembre de 2015. Los ediles habían apoyado a Amanda Acedo cuando se enfrentó en primarias a María Chivite (íntima amiga de Luena), que terminó convirtiéndose en secretaria general del PSN. La explicación desde Ferraz fue que los ediles habían apoyado a EH Bildu. Para los críticos, se trata de una venganza.
“En Tafalla existe la tradición de incluir en el equipo de Gobierno a miembros de otros partidos. No se considera ‘gobernar con’ sino estar presente en el equipo para estar al tanto de todo lo que se hace. El propio PSOE y UPN han incluido otras fuerzas en sus gobiernos”, explica Acedo.
La destitución de los dos concejales, uno de ellos secretario general del PSN en Tafalla, Juanjo Martínez, provocó la caída de la Ejecutiva local, con lo que se impuso una gestora que tendría que haber convocado elecciones el 4 de mayo de este año. Pero no ha sido así. Los concejales están en juicios contra el PSOE por su expulsión ante una posible vulneración de derechos humanos.
En otro pueblo navarro, Tudela, el secretario general, Manuel Campillo –también crítico con Chivite y Luena- se vio obligado a dimitir después de que le impusieran una lista distinta a la elegida por la militancia para las elecciones municipales. Algo similar ocurrió en Castejón, la agrupación socialista más grande de Navarra tras Pamplona, donde la dirección regional quería imponer unas listas distintas a las elegidas por los militantes de la agrupación, también crítica con el oficialismo. Terminaron disolviendo la agrupación e imponiendo una gestora. Tres gestoras en tres pueblos que solo se explican, según el sector crítico con Sánchez, por venganza y para acallar discrepancias.
Madrid
Uno de los casos más conocidos a nivel nacional fue la destitución de Tomás Gómez de manera unilateral por la Ejecutiva Federal. Tras su cese, ordenado directamente por Luena tras el inicio de la investigación de los sobrecostes del tranvía de Parla, se impuso otra gestora, en ese caso dirigida por Rafael Simancas.
El PSM se mostró en contra de la decisión, pero de poco sirvió a los antiguos dirigentes, que fueron apartados del partido e, incluso, conminados al ostracismo y vetados de un gran número de empresas previa llamada de Ferraz para pedir que no se les admitiera, han confirmado fuentes socialistas a Estrella Digital.
Políticos afines al antiguo secretario general del PSM, como Antonio Miguel Carmona, también fueron apartados de la primera línea política. Carmona, cabeza de lista del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, fue sustituido como portavoz municipal por Purificación Causapié y expulsado de los platós de televisión, donde era un habitual hasta entonces.
La lista de lugares donde Luena impuso gestoras se amplía a otros como el municipio de Parla y el distrito madrileño de Puente de Vallecas. Y aún hay más.
La copia de la maniobra de Castilla y León
También Óscar López, el que fuera secretario de Organización del PSOE con Alfredo Pérez Rubalcaba y portavoz del PSOE en el Senado, realizó una maniobra en Castilla y León calcada a la que terminó con la Ejecutiva de Sánchez.
En 2014, la federación socialista de Castilla y León estaba dividida entre los afines a López y los partidarios del entonces secretario general, Julio Villarrubia. Sin embargo, López tenía la mitad más uno de la Ejecutiva Autonómica, que presentó su dimisión y se nombró una gestora. Al poco tiempo, ese gobierno provisional convocó un congreso autonómico con primarias, en las que salió elegido Luis Tudanca.
Paula Pérez Cava