Podemos ha entrado en fase preparatoria de su próxima Asamblea Ciudadana estatal y su secretario general, Pablo Iglesias, va fijando posiciones en el debate, en el que apostará por que la discusión con Íñigo Errejón sea pública para que se puedan conocer con todo detalle cuáles son sus diferencias.
De cara a ese Vistalegre II, Iglesias buscará la confrontación de ideas, confirman fuentes de la dirección, que podrá desarrollarse en diferentes formatos.
Uno, a través de la presentación de varios documentos con diferentes propuestas sobre el modelo de partido, sobre los que después se busquen acuerdos; o bien, que ese debate no se centre exclusivamente en los documentos y se lleve a espacios públicos en los que se «pongan sobre la mesa» las diversas posiciones y, en su caso, las discrepancias.
Esa ultima opción ayudará a que queden claras las diferencias entre el Podemos «ganador y transversal» que defiende Errejón, y el Podemos que no abandone la calle y sea abanderado de la protesta y las demandas de la mayoría social, identificado con el sector de Iglesias.
Esta misma mañana el líder de Podemos ya avisaba de que el debate sobre qué partido quieren ser no debe partir de un pacto entre dirigentes o soluciones «precocinadas» que hurten la discusión a la gente y consideraba que cuantas más propuestas haya para que los inscritos puedan decidir entre ellas, «mejor».
Iglesias se pronunciaba así después de que Errejón se haya mostrado partidario de encontrar un acuerdo de «síntesis» entre los diferentes proyectos antes de la asamblea, aunque fuentes cercanas al número dos del partido aseguran que hoy no se ha sentido «emplazado» por Iglesias a definirse.
Otras fuentes del entorno de Iglesias explican a Efe que si hay dos proyectos las diferencias deben salir a la luz y detallarse con suficiente claridad para que las bases puedan decidir.
En cualquier caso, aún están en la fase de calentar motores y preven que la asamblea Vistalegre II, prevista para principios de año, se prolongue durante varias semanas, en las que debatirá toda la organización.
Lo importante, insisten, es que si hay grandes diferencias «se lleven al detalle»
EFE