El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha asegurado este lunes que los dos presuntos yihadistas detenidos el 28 de diciembre en el barrio madrileño de Moratalaz no planeaban ningún atentado «ni inminente ni remoto», y por tanto, no existía «una amenaza concreta» salvo que estaban enalteciendo al Daésh.
En una entrevista en Antena 3, Zoido ha querido dejar claro también que «hasta donde» él sabe «el Kalashnikov no existe», en referencia a que los detenidos, según diferentes medios de comunicación, disponían de este fusil, si bien sí que ha subrayado que contaban con cargadores y munición para este tipo de armas, así como un machete.
Sobre la existencia del Kalashninov, Zoido ha reiterado que ni siquiera los investigadores tenían constancia de su existencia, tras lo cual ha señalado que los dos presuntos yihadistas están en prisión por enaltecer al Daésh y «no por una atentado concreto que estuviese planeando».
Zoido ha recordado que España se enfrenta a la amenaza «global» del terrorismo yihadista frente al cual las fuerzas de seguridad están «a la vanguardia», con el «campo de experiencia» de ETA y con una «magnífica» coordinación de todos los cuerpos policiales.
Una cooperación policial que, a su juicio, impediría atentados como el de Berlín, en el que el Gobierno alemán ha reconocido fallos y «disfunciones».
«Lo que ha sucedido en Berlín aquí no puede suceder. La coordinación es extrema cada día y me asombra la discreción con la que se trabaja», ha dicho el ministro.
Ejemplo de esa coordinación ha sido, según el titular de Interior, las medidas adoptadas esta Navidad para prevenir atentados yihadistas, como el control de camiones a las entradas de las grandes ciudades, su circulación en las cabalgatas u otras iniciativas que Zoido «por discreción» ha preferido no desvelar.
«Puede tener la tranquilidad todo el pueblo español que a diario los servicios de inteligencia e información analizan cualquier atentado en cualquier parte del mundo para analizar sus métodos, sus consecuencias y todas medidas para que no pueda suceder lo mismo en España», ha añadido Zoido quien, no obstante, ha dicho que la «seguridad total» no existe.