El Gobierno prevé prorrogar un año más el Programa de Activación para el Empleo (PAE), que contempla la ayuda de 426 euros para parados de larga duración con cargas familiares, con algunas modificaciones que buscan ampliar el número de beneficiarios y que los sindicatos ven insuficientes.
Según han señalado fuentes sindicales, el Ministerio de Empleo presentará previsiblemente este martes día 4 a los agentes sociales un borrador de real decreto para la renovación de este plan, que se puso en marcha en 2015 y que se prorrogó hasta el próximo 16 de abril. «Se va a renovar con algunas mejoras pero no va a ser la transformación que hemos pedido para que se convierta en uno de los necesarios pilares del plan de choque para el empleo», resume el secretario de Protección Social y Políticas Públicas de CCOO, Carlos Bravo. Desde Empleo se limitan a señalar que el tema es uno de los que forman parte de la mesa de diálogo social y que las negociaciones están abiertas.
Entre esos cambios planteados por los sindicatos CCOO y UGT está eliminar el requisito de cargas familiares, reducir de 12 a 9 meses el tiempo desempleado para poder acceder a estas ayudas o que sea compatible con las rentas mínimas que dan las comunidades autónomas, entre otros puntos. «Es una buena noticia que se renueve pero no es suficiente. Se pierde una oportunidad para lograr un buen plan de choque para los parados de larga duración», explica Bravo, para quién junto a esos cambios en los criterios de acceso es clave dar más publicidad a estas ayudas.
El objetivo del plan era llegar a 400.000 personas pero, según los últimos datos facilitados por Empleo, el programa ha atendido a 217.721, de los que 140.139 han cobrado la prestación, lo que supone un 35% de esos potenciales beneficiarios. Además, sólo el 18 % de esta cifra, unos 25.000 desempleados, han causado baja en el mismo al encontrar un empleo. «Hay que valorar estas cifras pero resultan insuficientes», apunta Bravo.
Desde UGT, la secretaria general de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social, Mari Carmen Barrera, coincide en tachar de insuficientes estas cifras y en pedir a Empleo que sea ambicioso en las modificaciones de cara a la renovación.
EFE