Podem pide que Coscubiela abandone la portavocía de su grupo. Rufián, el especialista habitual, le condena en Twitter. La última voz de la última izquierda catalana abandonará la política. El soberanismo siempre fracturó a la izquierda catalana; en esta ocasión, se ha dado un paso más: las voces de izquierda serán sustituidas por el más banal populismo y la huera filosofía del Twitter.
“Me la refanfinfla” ha declarado Coscubiela al conocer el rufianesco tuit de Rufian. “Coscu” es ese tipo de sindicalista y político que difícilmente puede pronunciar un taco más elevado. Una insuficiencia en estos tiempos de matonismo tuitero.
La reacciones al discurso de Coscubiela
Probablemente, Coscubiela se sintiera como el viejo Bebel – aquel socialdemócrata alemán que creía haberse equivocado al recibir aplausos de la derecha-, cuando ayer Ciudadanos, Socialistas y Populares aplaudieron en pie su defensa del parlamentarismo.
Coscubiela fue la voz más pasional y éticamente creíble en los plenos de la desconexión. A las esperadas voces de Ciudadanos, Socialistas y Populares se unía, para enfado del portavoz de Garzón en Cataluña – Nuet- y de Podem (Podemos), la voz de Coscubiela: partidario del derecho a decidir y de un referéndum legal.
Inmediatamente, la política sectaria del independentismo se puso en marcha. Primero, el miércoles, fue Albano Dante, de Podem el que inició la cacería en Twitter, como contaba ayer Estrella Digital. El jueves, se encargó Rufián, que no pudo resistir su ausencia en la platea del teatro.
El rufianesco tuit del diputado en el parlamento español ha sido ampliamente contestado en las propias redes.
Coscubiela es como el 'camarada' q iba hace 40 años con las manos sin callos a las casas de los obreros a decirles q mejor no hacer huelgas.
— Gabriel Rufián (@gabrielrufian) 7 de septiembre de 2017
Un sindicalista de siempre
Rufián, que se encargaba en una ETT de externalizar trabajos hacia Latinoamérica, no ha dudado en recurrir a las “manos sin callos” que los reaccionarios de siempre han dedicado a los sindicalistas y la izquierda.
Joan Coscubiela, barcelonés, 63 años, licenciado en derecho, abogado, forma parte de la izquierda social y política desde que tiene uso de razón. Desde el mítico despacho laboralista de Luis Salvadores se ocupó, en los últimos años del franquismo, de asesorar a las ilegales Comisiones Obreras de la construcción, contribuyendo, luego, a la fundación de los gabinetes jurídicos del sindicato.
A partir de 1984, inició su carrera de representación sindical que culminó siendo elegido Secretario General, en sustitución de José Luis López Bulla, en 1995, cargo que ocupó hasta el año 2008.
Su paso a la vida institucional se produce en 2011 cuando es elegido diputado en el parlamento español, en las candidaturas de Iniciativa per Catalunya. En las últimas elecciones catalanas fue elegido diputado en la candidatura de Catalunya Si que es Pot.
La irritación soberanista
“No quiero que mi hijo… viva en un país donde la mayoría pise los derechos de los que no piensan como ellos”.
La dura crítica a Junts pel Si y la CUP fue respondida por un aplauso de las bancadas de la oposición en el Parlament catalán, mientras miembros del propio grupo de Coscubiela expresaban su rechazo.
Los evidentes gestos de incomodidad y rechazo de Puigdemont y Junqueras fueron traducidos en Twitter por Rufián. El pensamiento único del independentismo expulsa de la vida política a la última voz de la izquierda social y política catalana.
Juan B. Berga