Las últimas declaraciones de varios miembros del Govern aseguran que no estaban preparados para llevar adelante la República Catalana pero la información con la que cuenta la Guardia Civil apunta a que tenían prevista hasta la creación de un ejército propio de entre 18.000 y 20.000 militares, listos para un eventual enfrentamiento con España, tras la declaración unilateral de independencia. El Govern tenía previstas las instituciones que tendría que poner en marcha en su supuesto estado independiente y las Fuerzas Armadas se torna una organización básica, pese al rechazo general a todo lo castrense dentro del independentismo.
Además de la cantidad de efectivos que serían necesarios para poner en marcha ese ‘ejército catalán’, los independentistas también proponían la restauración del servicio militar obligatorio. Son algunas de las líneas básicas del documento interno ‘La Seguridad en la República Catalana, primeros planteamientos’, elaborado por Esquerra Republicana, que fue localizado por la Guardia Civil en los registros en el Departamento de Economía dentro de la Operación Anubis el 20 de septiembre y de los que se ha hecho eco el diario ‘El Mundo’. El informe, coordinado por el eurodiputado de ERC Jordi Solé, se presentó al vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, y fue manejado por el exsecretario de Hacienda del Govern Josep Lluís Salvadó, su mano derecha.
Uno de las ideas base que manejaron los autores del documento es que “el modelo de estados sin ejército presenta inconvenientes” y realiza una equiparación de Cataluña con países como “Austria, Dinamarca o Suiza”, donde el ratio de 250 militares por cada 100.000 habitantes-. Por eso, los cálculos del informe fijaban en una fuerza de entre 18.000 y 22.000 soldados. Esta fuerza estaría preparada contra ataques armados contra Cataluña que, aunque “poco probables, no son completamente descartables”, apunta el informe, que compara la situación con la de la frontera entre Rusia y Ucrania, tal y como revela ‘El Confidencial’, que también ha tenido acceso al documento.
En todo caso, “la república catalana tendrá que plantearse si quiere un cuerpo de defensa y cómo será, si compuesto por profesionales o por milicias, y qué rol internacional quiere tener”. La recomendación del informe es que, contando con los recursos limitados con los que contaría la Generalitat, la única salida sería la vuelta al servicio militar obligatorio, una práctica altamente impopular, según el informe. la ‘mili’ “tiene una imagen muy negativa entre los catalanes debido a la asociación mental que se hace con el ejército español”, apunta el documento.
Descarta la desmilitarización
Este informe desmentiría la versión de que los independentistas pretendían instaurar un estado pacifista sin ejército, similar al de Costa Rica, tal y como apuntaron algunos medios hace apenas unos días. Según esta versión, recogida en un informe de la Guardia Civil y difundido por la Agencia EFE, si se produjera una situación que supusiera un riesgo para la nueva república, los soberanistas creían que podría explorarse una ayuda de otros países.
Además, otro de los proyectos era impulsar al menos cinco unidades policiales que cubrieran las competencias que actualmente tiene el Estado español y que pensaban asumir, según figuraba en ese informe incautado por la Guardia Civil, según otra información publicada por ‘El Mundo’ el pasado día 9. Esas unidades se repartirían por competencias: una para luchar contra la delincuencia organizada interna y trasnacional, otra de Información para combatir el terrorismo y el narcotráfico, otra aduanera, otra dedicada al control del espacio aéreo y una quinta para el registro de identidades.
La información del diario precisa que en ese informe se asegura que «las amenazas no sólo no pararán con la independencia de Cataluña, sino que podrían agravarse; y no es recomendable confiar en la colaboración del Estado español», si bien entienden que los ataques a Cataluña «son poco probables pero no completamente descartables».
De hecho, la propia Fiscalía consideró que Carles Puigdemont utilizaría a los Mossos como la nueva “fuerza armada catalana contra quienes intenten hacer efectiva la vigencia de la Constitución Española en Cataluña”, según se recogió en la querella presentada ante la Audiencia Nacional por un delito de rebelión. Además, en ese escrito, el Ministerio Público tampoco descartaba la creación de un ejército propio.
En el “Libro Blanco de la Transición Nacional de Cataluña”, presentado por la Generalitat en septiembre de 2014 -y que ahora no aparece colgado en su web-, también se habla de Defensa y propone “crear las estructuras institucionales propias de un servicio de diplomacia exterior con capacidad para aplicar la Política Exterior y de Seguridad Común y la Política Común de Seguridad yi Defensa de la Unión Europea (PESC/ PCSD)”, según se recoge en una síntesis de este documento.
Paula Pérez Cava