José Enrique Abuín, alias 'El Chicle', se convirtió en el principal y único sospechoso de la desaparición de Diana Quer, según ha informado este martes el coronel jefe de la Unidad Operativa (UCO) de la Guardia Civil, Manuel Sánchez Corbí, en una rueda de prensa. Además, en la misma también se ha confirmado que el ADN del cuerpo coincide con el de la joven madrileña de 18 años desaparecida desde el 22 de agosto de 2016 en A Pobra do Caramiñal (A Coruña). Entre los detalles que ha revelado la Benemérita, se ha confirmado que el cuerpo de Diana se ha hallado en el interior de un aljibe lleno de agua atado de hombros y manos.
La Guardia Civil ha explicado este martes que José Enrique Abuín, más conocido como 'El Chicle', fue sospechoso desde el primer momento y desde hace más de un año le seguían la pista. De hecho, 'El Chicle' averiguó que los investigadores le seguían el rastro por lo que concertó una «entrevista informal» con uno de los agentes para asegurarse de que no tenían nada en concreto sobre él. «Él mismo se tendió una trampa en esa entrevista al confirmar que sí había estado en las fiesta de A Pobra la noche que Diana desapareció aunque negase su implicación», ha asegurado el coronel de la Guardia Civil. De hecho, ofreció su teléfono a la Benemérita para que lo analizasen. Sin embargo, «el terminal fue reseteado».
A Diana se le perdía el rastro el 22 de agosto de 2016 a las 2:42 de la madrugada. Al día siguiente, la madre de la joven, Diana López-Pinel se dirigió a la comisaría más de cercana de Rianxo para denunciar su desaparición. «El olfato de alguien de aquí -haciendo referencia a los agentes presentes en la rueda de prensa- le hizo pensar que se encontraban ante un secuestro», indicaba el coronel Corbí.
Las primeras investigaciones se centraron en el círculo cercano de familia y amistades. Sin embargo, tras analizar a la familia, «se descartó que tuvieran algo que ver con el suceso». En un primer momento, se montó un gran dispositivo de búsqueda por toda España y se reconstruyó la última noche de Diana ya que «las primeras horas eran fundamentales». Los investigadores centraron el caso a partir de cuatro ejes: «Los vehículos, el teléfono, los feriantes y el culpable». Tenían pocas pistas, pero según ha dicho, «las no pistas dan pistas, porque vamos descartando», ha contado.
Pronto se supo que «había un itinerario y un coche». Se había detectado el movimiento de Diana Quer, ya fuera «voluntario o involuntario». «Desde las 2.42 hasta las 2.58 es el trozo de vida del teléfono de Diana que esperamos que nos dé alguna información». Esa información llegó a través de las señales de las antenas de repetición. Así se descubrió el recorrido que hizo la joven aquella noche.
A pesar de estos primeros esfuerzos, el rastro no conducían a ningún sitio hasta el hallazgo del Iphone 6 de Diana el 27 de octubre del 2016 que devolvía las esperanzas a los investigadores y a la familia. «El teléfono significaba dos cosas: la confirmación de que había sido un secuestro y de que nos encontrábamos ante un delincuente profesional«, ha añadido el coronel. Además, los datos que aportó el terminal de la joven coincidían con la ubicación del teléfono de Abuín. Incluso, el Alfa Romeo gris que poseía 'El Chicle' fue visto en una gasolinera cercana al lugar donde desapareció Diana.
A partir de este momento, en el mismo mes de noviembre, 'El Chicle' pasó a ser en el principal y único sospechoso. Lo único que quedaba por confirmar era la implicación de más personas en la desaparición, algo que descartaron más adelante. «No había ninguna duda de que 'El Chicle' se llevó a Diana», ha añadido Corbí. Aun así, las pruebas obtenidas no valían nada ante el juez «si no había cuerpo». Por este motivo, la detención de Abuín el pasado 25 de diciembre tras intentar secuestrar a una joven, agilizó la acción de la Guardia Civil y, tras desmontar la coartada que ofrecieron la mujer de 'El Chicle' y sus cuñados», el detenido se desmoronó y terminó confesando.
Tras descubrir la implicación de José Enrique Abuín, los agentes del instituto armado también han explicado a los medios presentes que volverán a revisar los casos de violación y de otras personas desaparecidas en la zona ya que no descartan que 'El Chicle' esté detrás de ellos.
Según han informado los dos coroneles de la Guardia Civil que han intervenido en la rueda de prensa, la investigación ha estado llena de obstáculos durante este año y medio debido a la falta de pruebas acusatorias contra el sospechoso principal. Desde la Guardia Civil no han tenido reparo en asegurar que el caso de la desaparición de Diana Quer se ha convertido en uno de los más complejos a los que han tenido que enfrentarse en el instituto armado. «Difícilmente ninguna policía del mundo habría podido hacer más«, sentenciaba el coronel Sánchez Corbí.
Andrea Morea