En declaraciones a los periodistas en los pasillos del Parlamento andaluz, el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha informado de que el protocolo de búsqueda se activó a las ocho de la tarde de ayer, cuando familiares del niño, que desapareció sobre las 15.30 horas, lo pusieron en conocimiento de la Guardia Civil.
«La familia lo comunicó a esa hora porque, en principio, estaba en casa de los abuelos y a unos veinticinco metros está la casa de los primos y habitualmente se desplaza entre la casa de unos y otros; unos pensaban que estaba en la de los primos y otros que estaba en casa de los abuelos», ha explicado.
A partir de entonces se activó el dispositivo por parte de la Guardia Civil y hoy se ha reforzado con medios aéreos, además de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS) por si tuvieran que actuar en el entorno y unidades caninas de búsqueda de personas.
Según el delegado del Gobierno, de momento no hay ningún dato en relación con las circunstancias personales o familiares que pudieran indicar alguna causa de la desaparición.
«Hemos puesto en marcha el más amplio dispositivo para tener un resultado positivo lo antes posible», ha recalcado.
Según diversos mensajes difundidos a través de las redes sociales, el niño vestía un pantalón negro con rayas blancas de Adidas y una chaqueta roja con capucha y habría desaparecido cerca de Las Hortichuelas sobre las 15:00 horas de ayer.
Fuentes del Ayuntamiento de Níjar han informado de que 62 profesionales de la Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil y el 112, además de 150 vecinos voluntarios, peinan la zona en la que se produjo la desaparición.
Hasta la zona se ha desplazado también la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez.
La madre del niño y un familiar del padre han explicado a Efe que el niño se encontraba con su progenitor en casa de la abuela en Las Hortichuelas pasando los días libres que tenía con motivo del puente del Día de Andalucía.
Al parecer, sobre las 15:00 horas salió de dicho domicilio para dirigirse a casa de un primo que se encuentra a unos 150 metros.
Cuando por la tarde la abuela fue a buscarlo descubrió que su nieto no había llegado a su destino.
«Es un pueblo en el que nunca ha pasado nada, los críos están siempre de arriba para abajo», ha señalado un primo del progenitor.
EFE