En su sentencia, la sección cuarta de lo Penal considera que los diez acusados constituyeron una célula, ubicada en Terrassa (Barcelona), «con la única finalidad y motivo de cumplir y servir los postulados señalados por el Daesh atentos para llevar a cabo en cualquier momento un ataque contra instituciones como la Policía, entidades bancarias o intereses judíos asentados en España».
De este modo, la Sala ha acordado imponer 12 años de cárcel por un delito de integración en organización terrorista a los tres dirigentes de esta célula, para los que la Fiscalía pedía 19 años, mientras que a los otros siete, que se enfrentaban a una petición de 10 años de cárcel, les impone la pena de 8 años por el mismo delito en calidad de participantes.
EFE