Los populares, con mayoría en el Senado, han decidido retrasar una semana el debate de los Presupuestos, previsto para mañana, y aplazar hasta el próximo lunes el plazo para registrar enmiendas parciales a las cuentas, por lo que deberán volver al Congreso para su debate y aprobación definitiva. El portavoz del PP en el Senado, José Manuel Barreiro, ha argumentado que los senadores no pueden discutir el proyecto presupuestario en el Pleno del Senado sin que haya sido nombrado el nuevo ministro de Hacienda, y ha puntualizado que «no parecería lógico» que el ministro en funciones, Cristóbal Montoro, acuda a defender un presupuesto que ya ha asumido el PSOE.
El PSOE califica de venganza este retraso
Para el secretario general del PSOE, José Luis Ábalos, la estrategia es «un elemento de venganza claro. Demuestra la cultura del PP de compra de voluntades, es una irresponsabilidad, es una clara venganza, una muestra de resentimiento…y de la descomposición de la derecha en España». Ábalos tilda de «intolerable» esta actitud y que no tengan ni siquiera pudor de plantearla. Añade que «lo que esta haciendo el PP es impresentable y lo que es peor es que lo este diciendo con toda naturalidad y sin cortarse un pelo… Si elaboraron los mejores presupuestos no pueden ahora impedir que se puedan gestionar».
También se ha pronunciado el presidente del PNV, Andoni Ortuzar.
«A ver si el PNV va a ser ahora el culpable de todo»
Ortuzar ha añadido hoy que «en política la venganza y la revancha no suelen ser buenas herramientas». El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha considerado que si las enmiendas del PP quieren variar las inversiones pactadas con el PNV será un «ejercicio de revanchismo y de venganza», y ha recordado que el viernes habló con el ex presidente Rajoy y éste no le transmitió «reproche alguno» por el respaldo vasco a la moción de censura.
Por su parte, el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha afirmado que su formación no entrará ni en «guerras» ni en «venganzas» entre partidos con los Presupuestos que ellos siguen considerando buenos, y que si se plantean enmiendas, como ha anunciado el PP, votarán aquellas que crean que mejoran las cuentas públicas.
Tanto Barreiro como el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, han señalado que las nuevas enmiendas que el PP quiere incluir persiguen «mejorar» el texto y no van en contra de nadie. Han incidido en que estas iniciativas no habían podido ser introducidas por su pacto con el PNV, pero que una vez roto, nada les impide hacerlo.
Tras prosperar la moción de censura contra Mariano Rajoy que ha investido a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, el PP ha decidido ahora introducir cambios en los Presupuestos de 2018, que fueron aprobados en el Congreso con el apoyo del PNV. No obstante, Hernando ha dejado claro que no habrá cambios en el acuerdo sobre pensiones cerrado con los nacionalistas vascos.
El retraso de la tramitación parlamentaria en el Senado supone que el debate de los cinco vetos registrados a las cuentas (Unidos Podemos, ERC, PDeCAT, Compromís y EH Bildu) sea la próxima semana, con lo que el debate de enmiendas parciales podría posponerse a la del 18 de junio y la discusión en Pleno se retrasaría más allá del 19 de junio previsto inicialmente. Además, una vez que el Pleno del Senado apruebe el nuevo texto presupuestario éste deberá pasar nuevamente por el Pleno del Congreso para ser debatido y votado.
Las nuevas iniciativas que la mayoría absoluta del PP saque adelante en la Cámara Alta podrían ser rechazadas en el Congreso con una mayoría simple liderada por el PSOE.
Redacción