En una entrevista en la Sexta, el jefe del Ejecutivo ha instado «como ciudadano» a los medios de comunicación que han publicado informaciones sobre la tesis a rectificar, argumentando que no se puede «difamar sin pruebas».
Ha considerado que ha quedado «claro» que las acusaciones de plagio eran «falsas» y ha avanzado que se negará a comparecer en el Congreso de los Diputados para tratar este asunto porque, en su opinión, no se puede convertir la cámara baja en el lugar donde se planteen cuestiones personales.
Sánchez ha defendido el respeto a la pluralidad informativa y la crítica, pero ha recalcado que «lo que no se puede hacer es difamar».
Y, aunque ha descartado presentar una querella criminal, sí ha reivindicado su derecho a restituir su honorabilidad en este asunto -que ha comparado a las ‘fake news’-.
A la pregunta de por qué no publicó antes su tesis doctoral en internet -se abrió a la consulta general en la plataforma Teseo el pasado viernes-, el presidente del Gobierno ha argumentado que su trabajo es público desde el mismo día que lo defendió ante el tribunal, el 26 de noviembre de 2012.
Ha agregado que, a partir de la defensa, se publicó a través de varios trabajos académicos «con contenidos específicos y aportaciones específicas» que están «en la web» y a disposición de todo el mundo y, posteriormente, de un libro generalista.
Ante la «difamación» y el «ataque personal» contra su persona y su currículum, ha concluido, decidió finalmente ponerla a disposición del público en general en la plataforma Teseo.
Sánchez ha negado trato de favor del tribunal, cuya composición «acorde a la ley» ha defendido.
Que una persona que haya participado en un determinado artículo junto a él, ha insistido el titular del Ejecutivo, no cuestiona la «capacitación» ni la objetividad del tribunal.
Sánchez ha agradecido la «enorme profesionalidad» de la universidad en la que realizó la tesis y ha afirmado que ha expresado su solidaridad, apoyo y disculpas a «algunos miembros» de la misma tras haberse visto involucrados «en algo que nada tiene que ver con su prestigio».
Y ha contestado de forma tajante que no pidió a ninguno de ellos que salieran en su defensa: «No, esas cosas no las hago».
Finalmente, ha achacado las críticas políticas a la falta de «oposición política», que ante la ausencia de propuestas está utilizando el ataque personal.
Sánchez ha recalcado que solo dos grupos han reclamado que explique esta cuestión en el Congreso y, aunque ha indicado que quiere escuchar al resto, su opinión es que no se puede convertir el parlamento «en lugar donde se planteen cuestiones que nada tienen que ver con la política».
En su opinión, ha quedado acreditado que las acusaciones que se vertían sobre él han sido falsas y seguirles «dando pábulo» es «enturbiar de alguna manera y descender la calidad democracia».
Redacción