Este incremento fue aprobado el pasado 21 de diciembre por el Consejo de Ministros celebrado en Barcelona a través de un real decreto que no necesitó de convalidación en el Congreso de los Diputados y que cumplía así con el acuerdo presupuestario pactado entre el Gobierno y Podemos para el próximo año.
Con esta subida, la mayor desde 1977 y que eleva los ingresos anuales hasta los 12.600 euros, el Gobierno busca acercar el SMI español a la media europea y a su vez impulsar el consumo y la recaudación de cotizaciones para la Seguridad Social.
Este salario mínimo se deberá abonar tanto a los trabajadores fijos como a los eventuales o temporeros, así como a los empleados de hogar.
«El citado incremento atiende a la mejora de las condiciones generales de la economía y tiene como objetivo prevenir la pobreza en el trabajo y fomentar un crecimiento salarial general más dinámico», explica el Real Decreto publicado en el BOE.
Añade que para garantizar el derecho a una remuneración «equitativa y suficiente» para un nivel de vida «decoroso» el Comité Europeo de Derechos Sociales ha interpretado que el SMI debe rondar el 60 % del salario medio de los trabajadores.
«Elevar el salario mínimo interprofesional a 900 euros mensuales nos acerca a dicha recomendación», explica el real decreto en su exposición de motivos, en la que apunta que esta medida es «decisiva» para que la creación de empleo y la recuperación económica se traduzcan en una progresiva reducción real de la pobreza y de la desigualdad salarial.
Redacción