Fuentes de la Subdelegación del Gobierno han informado de que los mineros habían accedido a las 17:49 horas, y, según las previsiones, el tiempo requerido es de unas 24 horas, aunque dependerá del tipo de material con el que se encuentren.
Los mineros excavarán de forma manual una galería horizontal de cuatro metros de longitud para conectar el túnel a una profundidad de 72 metros con el pozo donde se cree que cayó el menor.
Los integrantes de la brigada, que bajarán por el túnel vertical de dos en dos, permanecerán haciendo los trabajos durante unos 30 ó 35 minutos, tras lo que serán relevados por dos compañeros y así sucesivamente para alcanzar el objetivo deseado.
La bajada de los mineros se realiza en el interior de una cápsula construida expresamente para el rescate y que está dotada de un rodamiento para evitar fricciones con la superficie del tubo.
La galería tendrá una cierta inclinación para facilitar la salida del material excavado aprovechando la gravedad y conforme vayan avanzando tendrán que apuntalar las paredes y el techo.
Un total de veintiséis efectivos, de los que ocho son de la Brigada de Salvamento Minero, diez guardias civiles -ocho especialistas de montaña y dos de actividades subacuáticas- y ocho bomberos del Consorcio Provincial, participan en la operación.