«Si se ha hecho algo mal que pague quien lo hizo mal, lo que no se puede hacer es estar quince años después preguntando a los que en esa época casi no estaban ni afiliados», ha subrayado.
En una entrevista con EFE, Casado ha denunciado que se intente utilizar la corrupción como un «espantapájaros» en la búsqueda de réditos partidistas intentando vincular con ella a una dirección del PP que no tenía ninguna responsabilidad directa en esos casos del pasado.
«Yo no puedo pedir disculpas de lo que ni he protagonizado ni he vivido ni sé si ha pasado y ni siquiera un juez ha fallado todavía», ha insistido.
Para el líder del PP, la primera sentencia del caso Gürtel, referida a dos campañas municipales en Pozuelo y Majadahonda fue la excusa en la que se basó la «vergonzosa y falsaria» moción de censura contra Mariano Rajoy que «supuestamente» era para regenerar la vida publica y convocar elecciones de inmediato.
No ve Casado ninguna contradicción en asegurar que nada tiene que ver con esos supuestos casos de corrupción y la excelente relación que guarda con Jose María Aznar, presidente del partido por aquellos años.
Pese a ello, reconoce que esos casos han afectado a la «marca» del PP y a sus expectativas electorales.
«Yo no puedo dar explicaciones de lo que desconozco y lo único que puedo decir es que a partir de ahora cualquier conducta que no sea ejemplar cuenta con el rechazo expreso de la dirección nacional», ha insistido.
Ha defendido, eso sí, al portavoz del PP en el Senado, relacionado con la llamada operación Kitchen, al que de momento no cree que haya que exigir ninguna responsabilidad política.
Para Casado, Cosidó no aparece en ningún papel ni en ninguna acusación «ni judicial, ni siquiera periodística».
«En esta ocasión no hay nada, por lo tanto lo que no podemos hacer ahora mismo es erigirnos en los que asumimos responsablides antes incluso de que haya una evidencia clara o de que un juez lo esté investigando», ha rematado.
Redacción