Una polémica que ha derivado en una crisis sin precedentes en este partido donde hasta ahora lo habitual era que las decisiones de la dirección se votasen por unanimidad y se acataban sin rechistar.
Por eso ha sorprendido en la cúpula el paso adelante que ha dado el diputado por Valladolid Francisco Igea, según han reconocido algunos dirigentes, para frenar la candidatura de Clemente al Gobierno de Castilla y León.
Una política captada por Cs para presentar batalla a Alfonso Fernández Mañueco, el candidato del PP a la Presidencia de la Junta con quien Clemente llevaba tiempo enfrentada.
Y chocante ha sido también en este partido que algunos dirigentes de peso, como Luis Garicano, el «número uno» de Cs a las europeas y uno de los pilares en los que se apoya Rivera, hayan apostado públicamente por Igea e incluso vayan a hacer abiertamente campaña por su candidatura.
Varios diputados consultados esperan que gane Igea este pulso, poniendo en valor su trabajo parlamentario y la «honestidad» con la que siempre ha actuado frente a las sombras de corrupción que planean sobre Clemente, que hasta hace solo una semana era la presidenta de las Cortes de esa comunidad.
Han reconocido también que esta situación se ha vivido con «mucha tensión» dentro del grupo parlamentario, donde Igea es muy querido.
Eso sí, a la hora de habilitar esta incorporación exprés de la ejecutiva en un Consejo General celebrado in extremis, solo hubo tres votos en contra y dos abstenciones mientras que 109 votaron a favor.
Algunas de esas voces discrepantes con el apoyo que el aparato del partido ha brindado a Clemente justifican que en esa votación lo que se estaba era validando a un aspirante, insistiendo en que la competición es buena y refuerza la democracia de la formación.
Otro fichaje de Cs que no ha dejado indiferente, en este caso ‘autofichaje», ha sido el de Inés Arrimadas, que abandona su puesto como líder de la oposición en Cataluña para hacer «tándem» con Rivera en las generales, una jugada que ha generado cierto desconcierto en el ámbito catalán.
En todo caso, en este primer bloque de primarias -desde las 10,00 horas de este viernes hasta las 10,00 de mañana- se votarán a los aspirantes autonómicos de Comunidad Valenciana, Canarias, Extremadura, Madrid, Cantabria, Asturias, La Rioja y Aragón.
Aragón y Asturias son las dos comunidades, aparte de Castilla y León, en las que el aparato de Cs ha apostado por aspirantes independientes: para la comunidad aragonesa el periodista Daniel Pérez, jefe de Onda Cero en ese territorio, y el exrector de la Universidad de Oviedo Juan Vázquez para el Principado.
Otros independientes que ha fichado Cs han sido Soraya Mayo, presidenta de ATA Castilla y León, para presentarse al Congreso por Valladolid, y Joan Mesquida, exdirector general de la Policía y la Guardia Civil con el PSOE, que concurrirá por la circunscripción de Baleares.
La periodista María Muñoz lo hará por Valencia y la sumiller Mari Carmen Martínez se presentará por la provincia de Cádiz, si bien todos ellos tendrán que pasar por el examen de las primarias el fin de semana que viene.
El exministro socialista de Trabajo Celestino Corbacho, que rompió el carné del PSOE hace más de un año, se suma como «número 3» a la lista de Manuel Valls al Ayuntamiento de Barcelona, promovida por Cs, y siguen en negociaciones con el que fuera presidente del PP de Baleares José Ramón Bauzá, que dejó a los populares hace un mes, para Europa.
También para las europeas tienen prácticamente cerrado la integración de Maite Pagazaurtundua, eurodiputada de UPYD y víctima del terrorismo.
Quedan dos meses para las elecciones legislativas y tres para las autonómicas, municipales y europeas, tiempo que Cs va a seguir con su labor de reclutamiento para contrarrestar su todavía frágil estructura territorial y jugar de paso al golpe de efecto. De hecho ya han dejado caer que habrá alguna sorpresa más en las próximas semanas.
Alicia López