El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha apelado a un Gobierno de centro-izquierda moderado y ha valorado una eventual alianza entre el PSOE y Ciudadanos para trabajar por la estabilidad y «dentro de la seriedad presupuestaria».
El Círculo de Empresarios confía en que se forme un Gobierno sólido y estable «alejado de postulados extremistas» y «comprometido con una política económica realista», entre cuyos principales objetivos estén la reducción del paro y la contención de la deuda pública.
La patronal catalana Foment del Treball (incluida en CEOE) ha pedido al próximo Gobierno que «impulse reformas concertadas» con los agentes económicos y sociales para favorecer la competitividad empresarial y el crecimiento económico.
Los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, han felicitado este lunes al PSOE y han reclamado un Gobierno de izquierdas que saque adelante cuestiones que quedaron bloqueadas en la anterior legislatura como la derogación parcial de la reforma laboral de 2012.
«Es evidente que hay una mayoría muy amplia que ha votado mirando a la izquierda», ha asegurado Álvarez, a lo que Sordo ha añadido que España «ha rechazado, no solo las propuestas de la extrema derecha, sino el discurso de las tres derechas, que había llegado a unos términos preocupantes».
El sindicato CSIF confía en que los resultados den lugar a un Gobierno estable «con altura de miras, generosidad y sentido de Estado» que impulse nuevas mejoras en las administraciones públicas y en los servicios que reciben los ciudadanos.
La Federación de autónomos ATA ha reclamado «estabilidad, moderación y seguridad jurídica ante las reformas que hay que afrontar para amortiguar la desaceleración económica”, mientras que los autónomos de UPTA han pedido que los tiempos políticos no retrasen los grandes asuntos pendientes para el colectivo, y los de UATAE, que se implante la cotización por ingresos reales.
La Plataforma Multisectorial contra la Morosidad (PMcM) espera que tanto el nuevo Gobierno como los partidos de la oposición hagan que la lucha contra la morosidad sea una realidad efectiva con la implantación de un régimen sancionador que multe a las empresas que no paguen a tiempo.
Las patronales sectoriales han reclamado también un Gobierno estable, como es el caso de Seopan -que agrupa a grandes constructoras y concesionarias- que desea que se ponga fin a la «prolongada falta de decisiones» que afecta a la inversión pública y a la actividad económica.
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha dicho que hay que acostumbrarse a un Parlamento fragmentado y confía en que el PSOE mantendrá el compromiso de privatizar la entidad, aunque ha recordado que es necesario que haya «oportunidades de mercado y precio» que permitan una nueva colocación.
La Asociación Multisectorial de Empresas de Tecnologías de la Información, Comunicaciones y Electrónica (Ametic) se ha mostrado «optimista» ante la posibilidad de que el PSOE apoye la investigación, el desarrollo, el emprendimiento y la digitalización, tal y como apuntaba en su programa electoral.
Entre tanto, un lunes más se han vuelto a movilizar en Bilbao los pensionistas vascos, que ven esperanzador el resultado electoral, pero que seguirán en la calle mientras no se apruebe una pensión mínima de 1.080 euros mensuales y un salario mínimo de 1.200 euros.
Redacción