Nel Cañedo, un pastor de los Picos de Europa que se ha convertido en una celebridad en redes sociales, donde sus vídeos acumulan millones de reproducciones, ha vuelto a hacerlo: el pasado día 1 de mayo grabó un vídeo que se ha hecho viral (y ya lleva varios). Conocido por ser «el azote del animalismo y ecologismo urbanita» como le ha definido algún medio, Cañedo denuncia en su último vídeo el cierre de un gallinero cercano a un hotel rural en Asturias porque el canto de los gallos despertaba a los huéspedes.
«Apeteciaseme cuando veía la foto dati, me cagondios, con una pala llana en medio el pecho pa hundite ese pecho palomo, me cago en la p…» de verdad que es lo mejor que he visto en el último lustro. Me declaro muy fan de Nel Cañedo Saavedra… https://t.co/CJOWXu5Xkw
— Antonio Fernández (@antoniofercas) 9 de mayo de 2019
“Estamos llegando al pueblo y estamos en temporada vacacional, así que ya sabéis [a unos perros]: no podemos tirarnos pedos porque molestamos a los turistas”. Así comienza el vídeo Nel Cañedo, un ganadero indignado.
Cañedo, hace una reflexión en esa mezcla de bable y español que tanto gusta a sus seguidores tras haber leído en la prensa que el dueño de un hotel ha logrado que cerraran el gallinero de su vecino porque el canto de los gallos despertaba a los clientes del establecimiento.
“Esta noticia me llamó la atención”, explica el ganadero en un vídeo de seis minutos y medio, que ha acumulado en una semana más de 240.000 visualizaciones en Youtube. “A los inquilinos del hotelito rural les molestaban las gallinas porque cantaban a horas intempestivas. ¿Qué horas son intempestivas, majos?”, se cuestiona Cañedo, quien luego critica a los turistas que a las tres de la mañana «están en el jardincito, ‘chunda, chunda, chunda’, y ¡nunca nadie protestó! defiende con ironía. Pero que un pollo cante a las siete de la mañana cuando sale el sol, es lo normal, ¿cuál es el sentido del calificativo “rural”? . ¿Para que venís a un pueblo a hacer turismo rural? Encima lo llamáis turismo rural. ¿A qué venís?», pregunta pregunta en el vídeo.
El ganadero reivindica que “un pollo cante a las siete de la mañana, cuando sale el sol”. Lo rural, como lo urbano, tiene unas características: “Las gallinas cantan, es lo normal, son el despertador de la naturaleza”.
Cañedo defiende que los turistas que se deciden por una zona rural acaban haciendo cualquier cosa menos lo que entra dentro de ese mismo concepto. “Lo normal es que en un pueblo haya gallinas, los tractores metan ruidos y las vacas caguen, no que el dueño de un hotel consiga que cierren un gallinero”, explica enfoscado.
“Cuando vas a Madrid, ¿se te ocurre ir al dueño del hotel a protestar porque hay ruido de los coches o pasan los camiones de la basura a las dos de la mañana? ¿A que no se te ocurre?”, termina reflexionando.
Estrella Digital