La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, ha destacado este jueves los beneficios sociales y económicos de este programa, durante una visita al balneario de Alange (Badajoz).
El programa se desarrolla desde el mes de febrero hasta diciembre, ambos incluidos, en turnos de estancia de 10 o 12 días y está previsto que en la temporada 2020 participen también otras 250.000 personas.
Los beneficiarios son pensionistas de jubilación e invalidez, de viudedad mayores de 55 años, el resto de pensionistas y perceptores de prestaciones o subsidios de desempleo con 60 años o más y asegurados o beneficiarios de la Seguridad Social con 65 años o más (aunque no sean pensionistas).
Además, se reconoce la posibilidad que les acompañen los hijos con discapacidad igual o superior al 45 %.
Carcedo ha valorado que el programa facilite el acceso de los pensionistas a precios reducidos, además de que contribuye a potenciar el desarrollo económico de las zonas donde se encuentran los balnearios, lo que redunda en la creación y el mantenimiento del empleo, según un comunicado del ministerio.
Se trata de una prestación socio-sanitaria, complementaria a las de la Seguridad Social, que tiene como objetivo principal proporcionar al colectivo de personas mayores, que por prescripción facultativa precisen tratamientos para problemas osteo-articulares o respiratorios, la posibilidad de acceder a balnearios a precios reducidos.
El importe total de los contratos con los balnearios que participan en el programa para las temporadas 2019 y 2020 y una posible prórroga asciende a 403.940.504,82 euros.
El Imserso aporta el 30,17 % -121.856.972,27 euros- y los usuarios el 69,83 -282.083.532,55 euros-.
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