Según han informado fuentes fiscales, la Fiscalía de la Audiencia Nacional deberá ahora decidir si cabe abrir una investigación a Open Arms por supuesto tráfico de seres humanos, delito para los que es competente la Audiencia Nacional.
Tras el desembarco del Open Arms en Lampedusa (Italia) con decenas de inmigrantes africanos, el presidente de Vox, Santiago Abascal presentó ante la Fiscalía General del Estado una denuncia contra la organización Proactiva Open Arms por presunta «colaboración con organización criminal para el tráfico de personas», contemplado en el artículo 570 del Código Penal, por lo que piden la detención del capitán del barco.
También se acusa a la organización de haber cometido presuntos delitos de infracción de la Ley Marítima.
De ser admitida, la denuncia reclama como medidas cautelares: ordenar la inmovilización inmediata del buque en cuanto llegue a puerto español y proceder a su incautación, así como detener a su capitán por presunto tráfico ilícito en el mar, y abrir una investigación a la ONG.
El propio Abascal anunció, a través de varios mensajes en su cuenta de Twitter, que la labor de esta ONG la hace «cómplice» de las mafias internacionales del tráfico de personas aunque está «disfrazando» sus actos como «rescates».
Vox afirma que Open Arms obtiene a través de delincuentes y organizaciones criminales la localización de los supuestos náufragos «como han demostrado investigaciones de diversos medios de comunicación».
En el texto presentado ante la Fiscalía se denuncia que Open Arms es «un vehículo de las mafias locales» que organizan los traslados de migrantes y que no les importa que estos estén «exponiendo su vida en el trayecto sin seguridad».
Por eso, consideran que se produce una colaboración «necesaria en la autoría del hecho delictivo con organización criminal», según el artículo 570 bis del Código Penal.
En este artículo se contemplan penas por cooperación con organización criminal de dos a cinco años si se trata de delitos graves, y de uno a tres años en los demás casos.
Según Abascal, Open Arms «no rescata náufragos» sino que los utiliza «como herramienta de extorsión contra los países que optan por la defensa de su soberanía» y forma parte de las «falsas asociaciones humanitarias que, en nombre de la solidaridad, explotan los buenos sentimientos de muchas personas».
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