Durante la inauguración del III Congreso Iberoamericano organizado por Ceapi, en la que también ha participado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, Ábalos aludía así, aunque sin mencionarlo, al plan Madrid 360.
El plan, presentado ayer por el alcalde madrileño para luchar contra la polución, suaviza el área de bajas emisiones Madrid Central, puesto en marcha por su antecesora Manuela Carmena, al permitir que circulen libremente vehículos con etiqueta C cuando viajen con más de un ocupante.
«Es importante que no pervirtamos la palabra libertad para imponer una agenda política que socava, precisamente, este noble ideal. Ahorremos a los ciudadanos la contaminación y a nosotros mismos la papeleta de tener que desdecirnos».
Durante su intervención, el ministro ha subrayado que la emergencia climática «es total» e incuestionable y es obligatorio que todas las actuaciones en el ámbito de la gobernanza política y empresarial vayan encaminadas hacia la sostenibilidad.
«Ya no hay negacionismo, ya no miramos hacia otro lado. Este pasado viernes hemos visto a miles de jóvenes de 150 países del mundo salir a la calle a exigir la salvación del planeta. No hay planeta B», ha añadido.
Por ello, en su opinión, no se comprende que todavía haya quienes «se empeñan en hacer política y establecer banderas y trincheras en un tema que es de salud pública, que trasciende las etiquetas ideológicas habituales, y que debería estar fuera de la refriega partidista».
Combatir el calentamiento global, disminuir la emisión de gases a la atmósfera, o reducir la contaminación en unos núcleos urbanos cada vez más sobrepoblados no debería enfrentar a unos partidos contra otros, ha insistido Ábalos.
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