Ruiz de Pinedo y el cabeza de lista de la coalición abertzale por Bizkaia, Oskar Matute, han participado en un mitin en la localidad alavesa de Llodio donde han subrayado la importancia de un soberanismo fuerte en España que impida que Pedro Sánchez y el PSOE «se echen en brazos de la derecha».
Ruiz de Pinedo ha puesto de relieve que, en Álava especialmente, hay mucho en juego en estas elecciones porque «las opciones son claras: o EH Bildu consigue un escaño o ese escaño pasará al PP. Democracia o involución antidemocrática. Derechos o recortes. Eso es lo que está en juego».
En esta primera jornada de campaña, en la que tanto el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, como el líder del PP han elegido Vitoria para sus mitines, Ruiz de Pinedo ha comentado que el candidato popular a la Presidencia del Gobierno ha acudido a la capital alavesa para exponer «las recetas de involución antidemocrática que pretende» imponer.
«El 10 de noviembre se nos presenta como una buena oportunidad de volver» a dar la lección de las anteriores elecciones y de «decirle a Casado y a sus consortes que la sociedad vasca no quiere involución ni recortes, que quiere vivir en una sociedad democrática donde se respeten los derechos y se respete a la gente».
Oskar Matute por su parte ha destacado «la importancia de un soberanismo fuerte que impida a Pedro Sánchez tomar el camino de la contrarreforma antidemocrática».
«La sociedad vasca tiene que tener claro que solo la unión y el trabajo en común de los soberanistas del Estado puede impedir que Sánchez y el PSOE se echen en brazos de la derecha para seguir profundizando en la contrarreforma antidemocrática. Solo un gobierno determinado y condicionado por los soberanistas hará imposible que las derechas y los poderes del Estado sigan campando a sus anchas», ha opinado.
Pese a que Sánchez ha prometido este viernes en Vitoria que no hará «una gran coalición con el PP» como vaticina el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, el candidato abertzale no descarta que finalmente los socialistas se apoyen en la derecha para gobernar.
A juicio de Matute, el secretario general del PSOE «lo dejó bien claro cuando decidió convocar unas nuevas elecciones: no quiere un gobierno condicionado por las fuerzas soberanistas, y no lo quiere porque sus soluciones para la crisis estructural que vive el Estado español pasan por la contrarreforma antidemocrática».
«Y claro, en esa ecuación no entran los independentistas ni Podemos porque la intención y el deseo de los poderes del Estado es profundizar en la contrarreforma mediante pactos de Estado entre los grandes partidos».
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