La PNL insta al Gobierno regional a que, a su vez, inste al Ejecutivo central a situar el Valle de los Caídos «dentro del orden constitucional y democrático» y a impulsar «la dignificación del cementerio», mediante la investigación histórica y honrando a las víctimas con una inscripción que recoja los nombres de los allí enterrados y de los presos que construyeron el complejo.
También propone crear un centro de interpretación, eliminar la publicidad turística sobre la denominada ‘Ruta Imperial’ y garantizar el derecho de «los familiares de los represaliados» a la identificación de los restos de estos y a darles la sepultura que elijan.
La iniciativa había sido redactada por Más Madrid y, finalmente, se ha votado un texto transaccional firmado con el PSOE y Unidas Podemos y que, según Más Madrid, incluía el contenido de las enmiendas propuestas por Ciudadanos, que no obstante no ha votado a favor.
La diputada de Ciudadanos Esther Ruiz ha justificado su postura final alegando que el texto transaccional deja abierta la puerta a trasladar los restos de Primo de Rivera fuera de la basílica en vez de proponer su desplazamiento a otro punto de la misma, como prefería el partido naranja para cumplir con las recomendaciones elaboradas en 2007 por el Comité de Expertos sobre el futuro del Valle de los Caídos.
El documento finalmente aprobado dice, a este respecto: «Se propone trasladar los restos de José Antonio Primo de Rivera a un lugar no preeminente».
«No cuenten con Ciudadanos para reabrir una España de bandos», ha dicho Ruiz, quien ha expresado su apuesta por un «proyecto de consenso» que honre «la memoria de todas las víctimas».
Para el diputado de Más Madrid Hugo Martínez Abarca, la «humilde» propuesta de su grupo pretende «adecentar uno de los lugares más bochornosos que tenemos en la Comunidad de Madrid», un «templo de la crueldad y el crimen» que debe convertirse, ha dicho, en «un bastión de la democracia y de los derechos humanos».
Tanto él como el diputado de Unidas Podemos Jacinto Morano han reprochado al PP su voto en contra, reprochándole que «a veces se puede ser equidistante pero hay veces que no», y el parlamentario morado ha agregado que no se pueden «reabrir heridas que están permanentemente abiertas».
«Para el grupo popular la PNL está fuera de lugar porque el futuro del valle de Cuelgamuros no es competencia de la Comunidad de Madrid», ha alegado el diputado del PP Pedro Corral, quien ha apuntado que «la prueba de nuestra fortaleza democrática» radica en poder manifestar «posiciones diversa sobre el Valle de los Caídos» sin ser «perseguido por ello».
El diputado de Vox Jaime de Berenguer ha justificado su rechazo a la iniciativa con el pretexto de que la izquierda, en su opinión, quiere construir «un relato histórico», compuesto por «una cultura entera desde el punto de visto etnográfico», con el que poder «controlar la conducta, las emociones y los pensamientos de los demás».
«Me pregunto por qué la derecha conservadora y liberal no nos acompaña en esto (…) España nos lo agradecería», ha lamentado el socialista José Manuel Rodríguez Uribes, quien ha llamado a «cerrar definitivamente el círculo de la reconciliación» y a «reconocer a todas las víctimas».