El gran incendio, en el que trabajan una veintena de dotaciones de los bomberos, ha obligado a activar el Plan de Emergencia Exterior del Sector Químico de Cataluña (Plaseqcat) y a desalojar a 250 personas, entre ellas a los trabajadores de la estación depuradora de aguas de la localidad situada en el mismo polígono Can Buscarons de Baix de Montornès.
Pese a esta evacuación del personal, la Agencia Catalana del Agua (ACA) ha asegurado que la EDAR-Montornès está funcionando con normalidad por control remoto.
La estación depuradora, gestionada por el Consorcio Bersòs-Tordera, está funcionado correctamente y está dando el servicio de depuración de aguas sin interrupción, a pesar de haber sido evacuada por la proximidad de las instalaciones quemadas, según ha informado la ACA.
Aunque la EDAR, por control remoto, «está tratando correctamente todos los vertidos procedentes del alcantarillado y de la red de colectores», la ACA ha reconocido que las tareas de extinción propias del incendio han causado vertidos directos al río provenientes de la actividad afectada por el siniestro, lo que está provocando afecciones al medio.
En este sentido, el Consorcio colabora y trabaja de manera coordinada con la Agencia Catalana del Agua para actuar en la zona y minimizar el impacto.
La cortina de humo que ha generado el incendio ha sido visible desde el Maresme y Barcelona y ha ocasionado el confinamiento de los vecinos de las poblaciones más cercanas.
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