«El PPC se pone a disposición de todas esas personas que depositaron su confianza en su momento en el Partido Socialista y que hoy se sienten abandonadas. Nosotros les apoyamos, nos hayan votado o no, porque consideramos que es nuestra obligación democrática», ha dicho en rueda de prensa en la sede de los populares en Barcelona.
Fernández ha bautizado la coalición entre PSOE y Unidas Podemos como «el pacto del abandono», dado que una de sus consecuencias es que los socialistas se han apartado del consitucionalismo y de las personas que lo representan al ofrecer contrapartidas a ERC a cambio de su abstención.
Dicho abandono, ha concretado, se ha perpetrado «en cuatro pasos»: primero «blanquearon al independentismo condenado por sedición»; después «asumieron el lenguaje independentista» al hablar de «conflicto político»; en tercer lugar, el PSC le «hizo la pelota» al president, Quim Torra, al cuestionar a la Junta Electoral Central, y finalmente ratificaron el «cambio de alianzas» en la sesión de ayer lunes del Congreso.
Para el dirigente popular, este cambio de alianzas del socialismo -a su entender, ha dejado el bloque constitucionalista del que sí formó parte en otoño de 2017, cuando se opuso al procés- se verá de nuevo si hay elecciones anticipadas en Cataluña.
Y es que, según ha asegurado, la «otra cara de la moneda» del pacto estatal será «un tripartito de izquierdas» en Cataluña, formado por ERC, PSC y comunes, si los resultados electorales lo permiten.
En cualquier caso, Fernández ha subrayado que el PPC está preparado para afrontar unas elecciones autonómicas anticipadas, un escenario que ha defendido que sería el mejor para Cataluña porque el actual Govern funciona «con respiración asistida».
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