Llop ha hecho esta declaración de intenciones en la sesión constitutiva de la Comisión de Reglamento, donde ha asegurado que quiere que ésta sea la legislatura de la reforma «consensuada» del Reglamento, que no se toca desde mediados de los años 90, por lo que considera probado que está «necesitado de revisión».
Ha recordado que desde entonces ha habido varios intentos para modificar esta ley, todos infructuosos, si bien de ellos surgieron diversos trabajos que en su opinión convendría «revisar y recuperar».
Llop ha detallado, a renglón seguido, cuáles deben ser las líneas maestras de la modificación reglamentaria, que comprende cuestiones de carácter técnico para «facilitar los debates» de manera que sean «más ágiles», así como para aumentar la «seguridad jurídica» de los trabajos de la Cámara Alta.
En un ámbito más político, ha apostado por buscar más transparencia, participación y control parlamentarios, así como mejorar el procedimiento legislativo, sin olvidar el refuerzo de la función de representación territorial del Senado.
Eso sí, la presidenta ha dejado claro que esta no será una tarea «exclusiva» de la Presidencia sino que requiere del esfuerzo del «conjunto de la Cámara» y ha pedido su colaboración a los grupos representados en la Comisión de Reglamento para que la reforma pueda ser una «realidad» en la legislatura que ahora comienza.
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