Sampedro aseguró esta mañana que cuatro ancianos de su residencia, de titularidad privada, habían fallecido por coronavirus y que otras seis personas habían muerto en los últimos días aunque no podían precisar las causas porque no se les habían hecho los test de COVID-19.
Esas afirmaciones han sido negadas por el director general de Salud Pública de Castilla-La Mancha, Juan Camacho, quien ha especificado que las acciones legales irán específicamente contra Sampedro.
En una rueda de prensa, Camacho ha precisado que la primera vez que Sampedro se puso en contacto con la Gerencia del Área Sanitaria de Tomelloso fue el sábado 14 de marzo y comunicó que había «un número pequeño de pacientes» que tenían síntomas de COVID-19 y que en esos momentos uno de sus residentes estaba ingresado en un hospital.
Además, ha indicado que él mismo habló con Sampedro el domingo 15 por la mañana y que ese día le comunicó que había «una situación compleja», que «la situación es desesperada y que están sobrepasados», toda vez que precisó que en esos momentos la residencia no tenía médico, porque se había marchado, y los profesionales no tenían equipos de protección individual (EPI).
Ante esta situación, Camacho ha afirmado que ese mismo domingo por la mañana se desplazó un equipo de médico y enfermero, al que se sumó otro equipo más por la tarde y recibieron el relevo de un equipo más de médico y enfermero en la noche del domingo al lunes, lo que supone un total de tres equipos de médico y enfermero, que estuvieron haciendo «el triaje completo de los 75 pacientes que en esos momentos presentaban síntomas en distintos estados de gravedad».
De esos 75 pacientes con síntomas, seis se derivaron a centros hospitalarios debido a su «estado más comprometido», 45 tenían «febrícula», es decir temperatura corporal alta sin que pueda considerarse fiebre y 21 pacientes presentaban «clínica respiratoria leve».
En total, hasta el momento se han practicado sesenta pruebas, se han confirmado 34 positivos y nueve pendientes de confirmar.
También ha informado de que el mismo domingo se mandaron EPI para los profesionales de la residencia.
Camacho ha informado de que, desde que el inicio del brote hasta este miércoles, han fallecido en la residencia quince ancianos, «la mayoría de ellos antes de conocer por parte de esta Dirección General la gravedad del brote», pues ha indicado que, por los análisis de los estudios epidemiológicos de la provincia de Ciudad Real, hasta el domingo se habían comunicado en esta provincia tres muertes por coronavirus.
Además, los datos oficiales aportados este miércoles por el Sescam apuntan a que en la provincia de Ciudad Real han fallecido trece personas por coronavirus.
Camacho también ha informado de que en estos momentos hay hospitalizados quince ancianos de esta residencia y que otros 91 están sanos y sin síntomas.
Ha añadido que en toda Castilla-La Mancha hay 400 residencias, en 25 de los cuales se han detectado casos de coronavirus, con brotes «muy limitados» donde se han tomado medidas para contener la situación.
Una de estas residencias donde se ha producido uno de estos brotes es la Núñez de Balboa de Albacete, donde han fallecido siete ancianos por coronavirus, según ha informado CCOO.
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