La delegada del área de Portavoz, Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, ha dado cuenta de ello a los portavoces de la materia de los grupos municipales del Ayuntamiento en una videoconferencia celebrada este martes, jornada en la que todas las áreas de Gobierno del Consistorio han celebrado una comisión «informal» con el resto de grupos políticos.
En su encuentro, Sanz ha hecho llegar a los portavoces un documento de diez páginas en el que se detallan las principales actuaciones llevadas a cabo por su área en el marco de la crisis de la Covid-19, entre ellas la situación de la funeraria municipal.
Según datos ofrecidos hoy por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid, los jueces de la región han firmado durante la segunda quincena de marzo, con el estado de alarma en vigor, 9.007 licencias de enterramiento, cifra que duplica ampliamente las 4.125 defunciones que registró el Instituto Nacional de Estadística en todo el mes de marzo de 2019.
El incremento del trabajo de la funeraria ha generada también un incremento de las jornadas de trabajo de los empleados pese a la contratación de 20 personas -con lo que se han agotado las bolsas de trabajo temporal- y la redistribución del personal interno, explica el Ayuntamiento en un comunicado.
Servicios Funerarios de Madrid ha ampliado la capacidad de almacenamiento de fallecidos en instalaciones refrigeradas, ha reforzado la limpieza y desinfección de las instalaciones y vehículos y colabora en el dispositivo puesto en marcha por la Comunidad de Madrid y la Unidad Militar de Emergencias (UME) para la recogida de fallecidos en hospitales y residencias.
También ha puesto en marcha un programa gratuito de apoyo al duelo y de otras iniciativas para que las familias puedan desarrollar la primera fase de su duelo de forma telemática o virtual.
En cuanto a las funerarias privadas de Madrid, que están trabajando en hospitales, residencias y domicilios, también han «tenido previsión» y han incorporado nuevo personal pero el volumen de trabajo «no termina de bajar», dicen desde la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Funerarios (Panasef).
En toda la provincia la actividad «se multiplica por cuatro o por cinco»: «Hay sitios en los que el atasco es mucho», aseguran.
Argumentan que hoy «ha vuelto a subir el número de fallecidos en Madrid» con 348 personas -según los datos del Ministerio de Sanidad, se han registrado 235 muertes por coronavirus, 40 más que el día anterior- y que también se están produciendo «atascos» en los registros civiles a pesar de que haya aumentado «el número de horas de atención al público».
Desde la patronal indican también que en las morgues provisionales «no existe un plan para la gestión de los fallecidos coordinado con el sector» por parte de la Comunidad de Madrid.
Añaden además que el Ministerio de Sanidad ha hecho llegar hoy a las funerarias de la región, además de a otras comunidades, unas «primeras donaciones» de equipos de protección individual (EPI), mascarillas y guantes.
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