«Paguen las nóminas y váyanse», ha reiterado Abascal en su intervención en el pleno del Congreso durante el debate sobre la segunda ampliación del estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19.
Abascal ha cuestionado las cifras oficiales, que «amenazan con ser el gran bulo» de la pandemia, y ha recalcado que Pedro Sánchez y Pablo Iglesias son los «responsables de la mayor tasa de mortalidad del mundo por coronavirus».
Por eso, ha reprochado al presidente del Gobierno que se haya «atrevido a pronosticar una victoria total con miles de muertos» y ha advertido de que España «saldrá de ésta, pero ya no hay victoria total posible».
El líder de Vox ha subrayado que muchas personas han muerto durante la «interminables» intervenciones de Sánchez y le ha pedido que se ahorre su «aló presidente», que, según ha dicho, a muchos les gustaría sustituir por un «agur presidente».
Y es que, según Abascal, el Gobierno español es el responsable de «la peor gestión del mundo en esta tragedia» y está «incontrolado» con un poder «desmesurado», de ahí que se haya dedicado a «amordazar» al Congreso y a «sobornar» con subvenciones a medios de comunicación.
Pero ha recalcado que ya han agotado la paciencia de Vox y ha recordado que ya dijo que no apoyaría de nuevo a Sánchez si no rectificaba las medidas económicas y su «cúmulo de chapuzas» ni renunciaba al «chavismo» que busca la destrucción de las clases medias.
En su opinión, el Gobierno no tiene un plan para sacar a España de la tragedia y, por eso, Vox no será «cómplice de su negligencia, de su incompetencia y, mucho menos, del sectarismo o los delirios totalitarios del señor Iglesias».
Ha contrapuesto a esta situación su «estado de alarma alternativo» que contempla, entre otras medidas, la continuidad del confinamiento, test masivos, cancelación de subvenciones, ciberlocalización voluntaria por parte de las autoridades sanitarias y presionar a la Unión Europea sin dejar de buscar acuerdo bilaterales.
Ha incidido en que Sánchez apela a una reedición de los Pactos de la Moncloa, cuando todavía, si quiere, es posible evitar la destrucción y ha precisado, para ello, no harían falta los 200.000 millones de euro que ha comprometido.
Según Abascal, 85.000 millones bastarían para detener la angustia y las necesidades de millones de hogares, ya que 75.000 serían para pagar las nóminas de marzo, abril y mayo de los trabajadores y los 10.000 restantes para dar un plus a los profesionales que están haciendo frente a la crisis.
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